La historia de Antolín González (23) parecía destinada al éxito. Con apenas 19 años, el joven piloto español comenzaba a hacerse un nombre en el competitivo mundo del automovilismo. Su talento en las pistas y su proyección internacional hacían pensar que estaba frente a una carrera prometedora.
Sin embargo, todo cambió de forma abrupta y trágica la madrugada del lunes 8 de julio, cuando fue detenido en Gijón acusado de asesinar a su propio padre.
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Tal y como detalló la prensa local, antes de las 15:00 horas de este martes un coche de la Policía Nacional trasladaba al supuesto parricida a los juzgados de Aranda de Duero, donde la jueza tomó declaración durante toda la mañana a ocho testigos y tras lo cual determinó su ingreso en prisión provisional.
Todos los detalles del parricidio de Antolín González
El crimen ocurrió en el domicilio familiar, ubicado en la localidad de Aranda de Duero, municipio español situada en el sur de la provincia de Burgos. El joven habría atacado a su padre, de 60 años, con un cuchillo, provocándole una herida letal en el cuello.
Los servicios de emergencia llegaron al lugar tras una llamada al 112, pero nada pudieron hacer: el hombre ya había fallecido.
En cuanto al agresor, el piloto español se dio a la fuga y fue detenido posteriormente sin ofrecer resistencia en la localidad de Sinovas, que pertenece a Aranda de Duero.
Cabe mencionar que el joven detenido carecía de antecedentes policiales, según la Subdelegación del Gobierno en Burgos. El fallecido es el propietario de Aceitunas Antolín y es un empresario del negocio del encurtido muy conocido en la localidad.
Los motivos que habrían impulsado al parricidio
Antolín González era una promesa del mundo del automovilismo desde los ocho años, cuando batió el récord de la pista de Villariezo a bordo de un kart. Posteriormente competiría en Fórmula 4 y Fórmula 3 donde llegó a correr en un campeonato en Asia en el que logró ser subcampeón, aunque aseguran que nunca llegó a la Fórmula 1 por falta de apoyo económico.
La principal hipótesis sobre qué pudo llevar a un hijo a matar a su padre es la de un posible desencuentro familiar. Hasta el momento no se ha informado de que el arma homicida haya sido localizada.
El piloto de 23 años nunca llegó a alcanzar la Fórmula 1 pese a que tenía todas las condiciones para ello. Al parecer, no gozó del apoyo económico necesario, lo que le apartó de las pistas. Su padre, a su vez, tenía un comercio de aceitunas en la calle San Antonio, 8 de Aranda de Duero que lleva el nombre de él y de su hijo.
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