El triple femicidio de Morena Verdi (20), Brenda del Castillo (20) y Lara Gutiérrez (15) sigue revelando detalles escalofriantes. En las últimas horas se conoció el último posteo que Morena compartió en su cuenta de Instagram desde el interior de la camioneta Chevrolet Tracker blanca en la que viajaban rumbo a Florencio Varela, lugar donde fueron torturadas y asesinadas.
La imagen, recuperada por la Justicia, mostraba dos llaveros colgando: uno de “Baby Yoda”, que pertenecía a Morena, y otro de “Luigi”, personaje de Mario Bros., que era de Lara. Lo llamativo fue la frase que acompañaba la foto: “Desastre van a hacer estos dos hoy”.
Según relató un testigo, ambos llaveros tenían clavado un pequeño objeto que las chicas usaban ocasionalmente para consumir tusi, una droga sintética. Por eso Morena habría escrito ese comentario, convencida junto a sus amigas de que se dirigían a una fiesta.
La historia fue publicada alrededor de las 23 horas del viernes 19 de septiembre. Después de ese momento, no hubo más actividad en su perfil. Los mensajes que amigos y conocidos le enviaron cerca de la 1 de la madrugada ya no fueron respondidos, y a las 2 de la mañana se registró la última conexión de su celular.
El ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, aseguró que el tusi era uno de los productos que comercializaba “Pequeño Jota”, el presunto jefe narco acusado de ordenar la ejecución de las jóvenes. El funcionario explicó que la organización pretendía afianzarse en el Bajo Flores y expandirse a Florencio Varela a través de ese mercado ilegal.
Los estremecedores datos del informe forense de las tres chicas asesinadas
Los cuerpos de Morena Verdi, Brenda del Castillo y Lara Gutiérrez presentaban lesiones compatibles con torturas y una violencia extrema, lo que refuerza la hipótesis de un ajuste de cuentas narco.
En el caso de Morena, los forenses detectaron una luxación cervical y golpes en el rostro. Brenda murió por una fractura de cráneo, con aplastamiento facial y heridas punzocortantes en el cuello; además, tenía un corte abdominal realizado después de su muerte.
Lara, la menor, fue sometida a torturas: le amputaron los cinco dedos de la mano izquierda, presentaba quemaduras compatibles con cigarrillos, un corte parcial en la oreja izquierda y otro en el cuello que le seccionó la arteria carótida.
Los especialistas concluyeron que las tres fueron asesinadas el 20 de septiembre, entre las 3 y las 6 de la mañana, pocas horas después de haber sido vistas con vida por última vez.
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