Durante una entrevista con Intrusos, Mabel López, madre de Lourdes Fernández —conocida como Lowrdez, exintegrante de Bandana—, rompió el silencio y compartió el dramático recorrido que culminó con el rescate de su hija, quien estuvo desaparecida y presuntamente retenida contra su voluntad por su expareja, Leandro García Gómez.
Todo comenzó el 4 de octubre, cuando Lourdes asistió al cumpleaños de su madre en mal estado. “Se quejaba de dolor en las costillas y dijo que se había caído de la escalera”, relató Mabel. Fue su otra hija, Anita, quien notó las lesiones. A partir de ese momento, el contacto con Lourdes se volvió esporádico y preocupante. El último llamado fue el 19 de octubre, Día de la Madre, cuando Lourdes le dijo que no podía asistir porque era el cumpleaños de su pareja. Luego, silencio absoluto.
La alarma se encendió el 22 de octubre, cuando Mabel comenzó a recibir audios de Lourdes en los que no podía articular palabras. “Tengo algo particular con ella: cuando pasa algo, me pongo inquieta. Hacía 48 horas que no dormía”, confesó. Fue entonces cuando decidió acudir a la Justicia. “Me atendieron, me hicieron un acta y esperé más de dos horas. Me dijeron que mi denuncia me habilitaba a pedir una perimetral contra él y una pericia para saber el estado de mi hija. Decidí llevarlo al fuero penal”, explicó.
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Gracias a su insistencia, se activó el operativo que permitió encontrar a Lourdes con vida en el domicilio de García Gómez, quien fue detenido e imputado por “privación ilegítima de la libertad”. La cantante fue trasladada al Hospital Fernández, donde recibió el alta médica. Sin embargo, dejó en claro que no quería ver a su madre. “Si no me quiere ver por tres años y ella está bien, no me importa”, dijo Mabel entre lágrimas.
La mujer también se refirió al padre de Lourdes, Omar Fernández, con quien mantiene diferencias. “Él dijo que estaba enferma. Yo no podía escuchar eso. Él le cree todo, y yo no le creo nada, porque sé cómo viene la mano”, afirmó.
Mabel recordó que los primeros signos de violencia aparecieron cuando Lourdes se separó por primera vez. “Me contó todo lo que venía pasando. Por eso me sorprendió que volviera con él”, dijo. Y concluyó: “Es muy difícil acompañar este tipo de cosas. Uno puede apoyar, comprender, pero no justificar. Tenía que pasar algo muy grave para que esto se activara”.
Su testimonio, valiente y doloroso, dejó al descubierto una historia de violencia, silencio y lucha que conmovió a todo el país.
