La investigación por el crimen de Débora Damaris Bulacio Del Valle dio un paso decisivo en las últimas horas con el informe preliminar de la autopsia a su cuerpo. Es que según los primeros resultados, la mujer de 45 años fue brutalmente asesinada.
De acuerdo al informe al que tuvo acceso Infobae, la víctima fue estrangulada y presentaba golpes en distintas partes del cuerpo. Los forenses además detectaron lesiones que podrían ser defensivas, un dato que sugiere una pelea a corta distancia antes del asesinato.
El hallazgo del cuerpo había ocurrido pocas horas después de su último contacto con la familia.
Qué se sabe del crimen de Débora Bulacio
Débora había viajado a Necochea para pasar el fin de semana con su pareja en el camping Miguel Lillo. Desde allí, envió audios a su hija que hoy resultan estremecedores.
“Acá estoy, pasándola no muy bien, pero bueno, intentando pasarla bien ahora”, dijo en uno de ellos. Poco después, sumó otro mensaje que expuso su desánimo: “A ver si me pongo las pilas y trato de pasarla bien porque la verdad que la vengo pasando súper mal. Debe ser mi culpa, yo sé que es mi culpa, pero bueno”.
De acuerdo con el relato de Tania, su hija, esos audios fueron parte de un intercambio intermitente, condicionado por la falta de crédito y la necesidad de enganchar wifi en la zona del camping.
“Lo último que sé de ella es del sábado a la noche. Me mandó que no tenía crédito, que estaba usando wifi ahí, y el último mensaje que me mandó fue un audio diciéndome que había agarrado wifi y que me amaba”, contó Tania en dialogo con TN. Al día siguiente, la joven intentó responderle, pero “ya no le llegaban los mensajes”.
El operativo policial terminó con la peor noticia: Débora fue encontrada semienterrada en la arena, en un sector lindero al Lago de los Cisnes, a pocos metros del acceso al camping donde la habían visto con vida por última vez el sábado.
El lugar del hallazgo se ubicó entre la avenida 2 y la calle 72, muy cerca del mar. La escena fue preservada por Policía Científica, que levantó muestras y relevó el área para reconstruir la dinámica del hecho.
Con la autopsia preliminar sobre la mesa, la causa puso el foco en Ángel Andrés Gutiérrez, pareja de la víctima, quien fue detenido e imputado por femicidio. Hasta el cierre de esta crónica, el acusado se había negado a declarar.
La fiscalía aguardó estudios complementarios —entre ellos toxicología y análisis de rastros— y cruzó los resultados con antenas, testimonios y cámaras del corredor que vincula el camping con la zona del hallazgo.
Los audios de Débora, sumados al informe forense, trazaron una narrativa que los investigadores leen con atención: aislamiento, malestar expresado y un final violento a muy corta distancia. La familia reclamó celeridad y el barrio, conmocionado, acompañó con pedidos de justicia.
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