La investigación por el triple femicidio de Brenda del Castillo (20), Morena Verdi (20) y Lara Gutiérrez (15) en Florencio Varela dio un giro clave en las últimas horas. Interpol difundió la imagen y los documentos de identidad de quien sería el autor intelectual del crimen: Tony Janzen Valverde Victoriano, un ciudadano peruano de 20 años, conocido en el mundo narco como “Pequeño Jota”.
La decisión de hacer pública su foto responde a la presunta intención del acusado de fugarse del país. Según fuentes del Ministerio de Seguridad bonaerense, se estableció un pedido de captura internacional y se reforzaron los controles en aeropuertos y pasos fronterizos. “Tenemos controles en todos los puntos migratorios”, confirmó el coronel Juan Carlos Bazoalto, director de Interpol en Bolivia.
La imagen difundida muestra a un joven de rostro serio, con rasgos que coinciden con los testimonios recabados en la causa. Junto a la foto, se reveló su cédula peruana, que permitió confirmar su identidad y vincularlo directamente con la organización narcocriminal que opera en la villa 1-11-14 y en el conurbano bonaerense.
La principal hipótesis de los investigadores sostiene que “Pequeño Jota” contrató sicarios para ejecutar un crimen premeditado como represalia por el supuesto robo de dinero y cocaína. Una de las detenidas confesó que las víctimas fueron asesinadas en su casa, alquilada por tres hombres de nacionalidad peruana. El móvil sería el robo de cinco kilos de droga o, según otra versión, de 70.000 dólares en efectivo.
Pero lo más escalofriante es que el crimen habría sido transmitido en vivo a través de un grupo cerrado en redes sociales. “Dejó un claro mensaje con las muertes”, señalaron fuentes judiciales. La frase que habría repetido durante el asesinato fue: “Esto le pasa a quienes me roban”.
El perfil de “Pequeño Jota” preocupa a las autoridades. A pesar de su corta edad, es considerado “extremadamente sanguinario” y con aspiraciones de capo narco. Según los investigadores, buscaba imitar el estilo de los criminales que aparecen en series y películas, con gestos ostentosos de poder. Sin embargo, su estructura era rudimentaria y dejó huellas evidentes en la escena del crimen.
Los allanamientos realizados en el Barrio Zavaleta, donde se cree que operaba, no lograron dar con su paradero. En uno de los operativos, los efectivos encontraron viandas recién preparadas, dinero en efectivo y dispositivos electrónicos que podrían contener registros del crimen. Pero “Pequeño Jota” ya no estaba allí.
Mientras tanto, ya son cinco los detenidos en la causa, incluido el conductor de la camioneta blanca en la que las jóvenes fueron vistas por última vez. El hombre fue capturado en Bolivia y trasladado a Jujuy bajo un fuerte operativo de seguridad.
La búsqueda de “Pequeño Jota” continúa y se convirtió en prioridad para las fuerzas de seguridad. La difusión de su imagen busca alertar a la población y facilitar su captura. La causa, que conmocionó al país, sigue abierta y cada detalle suma en el camino hacia la justicia.
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