Kia ya no se conforma con ser una de las marcas de referencia en el universo de los sedanes y los SUV. Ahora decidió dar un paso más y meterse en un terreno dominado históricamente por gigantes como Toyota o Ford: el de las pick-ups medianas. Su carta de presentación es la Tasman, un modelo que combina robustez, confort y diseño moderno para competir en los mercados más exigentes.
La Tasman no es un proyecto improvisado. La marca la desarrolló desde cero y la probó en algunos de los lugares más extremos del planeta: desde los desiertos de Australia y Emiratos Árabes hasta la nieve de Suecia. El objetivo fue claro: crear un vehículo capaz de adaptarse tanto al día a día urbano como a las aventuras fuera del camino.
Con esta apuesta, Kia quiere plantar bandera en regiones donde las pick-ups no son solo vehículos de trabajo, sino también parte de la vida cotidiana. Australia, Medio Oriente, África y Corea son los primeros destinos confirmados.
Esta pick-up fue pensada para ser práctica y resistente. Puede llevar cargas pesadas, arrastrar un remolque de gran tamaño y, al mismo tiempo, ofrecer un andar cómodo para quienes la usan a diario. Es una camioneta con la que se puede ir al campo, atravesar caminos de tierra o simplemente llevar a la familia con la misma comodidad que un SUV.
Dependiendo del país, la Kia Tasman estará disponible con un motor naftero o diésel. La idea es adaptarse a las necesidades de cada región: más potencia para quienes buscan rendimiento y más eficiencia para los que priorizan el trabajo y la autonomía.
Si por fuera la Tasman muestra una imagen imponente, por dentro sorprende con un interior amplio y moderno. El espacio en las plazas traseras es de los mejores de su categoría y las puertas traseras se abren casi por completo para facilitar el acceso.
El tablero integra pantallas digitales que concentran la información de manejo y entretenimiento, además de un sistema de sonido premium que realza la experiencia a bordo. Todo esto, acompañado por múltiples compartimientos y soluciones prácticas para guardar herramientas o equipaje.
La llegada de la Tasman marca el ingreso de Kia a un terreno donde pocos se animan a entrar. La competencia será dura: Toyota Hilux, Ford Ranger o Volkswagen Amarok son referentes con historia. Pero Kia confía en que su propuesta, que mezcla diseño, tecnología y versatilidad, atraerá tanto a quienes buscan un vehículo de trabajo como a los que quieren una camioneta para disfrutar el fin de semana.
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