Juana Repetto sorprendió a sus seguidores este miércoles con una declaración contundente sobre la crianza de su hijo mayor, Toribio, a quien cariñosamente llama Toro: “Toro no tiene teléfono y no tendrá por un par de años más”, escribió en una de sus historias de Instagram. La actriz explicó que, en lugar de un celular, optó por regalarle un walkie talkie para mantener la comunicación cuando el niño sale a andar en bicicleta por el barrio. “Antes lo acompañaba, ahora no puedo, así que me quedo acá en casa y estamos en contacto”, relató en un video donde se la ve dialogando con su hijo mientras abren uno de los varios paquetes que compró en las últimas horas.
Esta decisión se enmarca en una serie de historias donde Juana mostró las compras online que realizó para pasar el verano en casa junto a Toro y Belisario, su hijo menor. Entre los productos que enseñó, mencionó un kit de buceo, antiparras y los mencionados walkie talkies, todo pensado para entretener a los chicos durante las vacaciones.
La actriz atraviesa un momento especial: está embarazada de su tercer hijo y, según reveló en redes, debe cumplir reposo por indicación médica. Esto la llevó a reorganizar sus planes para el verano: “Como no salgo, me estoy comprando cosas que antes no compraba online ni en pedo”, escribió con humor, detallando artículos para el hogar y para sus mascotas, como pipetas antipulgas y comida. Juana también aclaró que no habrá viajes ni salidas frecuentes: “Vamos a estar todo el verano acá, no nos vamos de vacaciones a ningún lado”, dijo en cámara.
El reposo responde a cuidados propios del embarazo, que transita con tranquilidad pero con la necesidad de evitar esfuerzos físicos. Por eso, la actriz busca alternativas para que sus hijos se diviertan sin salir demasiado y, al mismo tiempo, mantenerlos activos y conectados con juegos.
Una tendencia en la crianza consciente
La decisión de Juana de postergar el uso del celular para su hijo mayor se suma a una corriente cada vez más extendida entre padres que priorizan la infancia libre de pantallas. “Me pareció buena alternativa el walkie talkie”, explicó, reforzando la idea de que la comunicación puede darse sin recurrir a dispositivos que implican acceso a internet y redes sociales.
Con esta postura, Juana abre el debate sobre los límites tecnológicos en la niñez, mientras comparte su día a día con naturalidad y humor. Entre compras online, juegos y cuidados especiales, la actriz se prepara para un verano distinto, marcado por el reposo y la espera de su tercer hijo, pero también por decisiones firmes sobre cómo quiere criar a sus chicos.
