Lady Kitty Spencer, la sobrina más mediática de la princesa Diana, volvió a convertirse en protagonista de la temporada de verano europeo. Reconocida influencer y referente de la moda internacional, la joven aristócrata de 34 años fue vista junto a su esposo, el empresario sudafricano-británico Michael Lewis, y un grupo de amigos disfrutando de una tarde en Club 55, el exclusivo parador ubicado en la playa de Pampelonne en Ramatuelle, un verdadero punto de encuentro del jet set internacional en la Riviera Francesa.
Con su estilo siempre sofisticado, la royal encarna como pocas el legado fashionista de la realeza británica, pero con un sello propio que la llevó a desfilar para marcas de lujo y a consolidarse como un ícono de la moda. En cada una de sus apariciones públicas, logra captar la atención de los flashes, y esta vez no fue la excepción.
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La llegada de Kitty Spencer se da durante el cierre de temporada de Saint-Tropez, un destino que cada año recibe a miles de turistas y celebrities de todo el mundo. Con sus playas de arena blanca, yates de lujo y restaurantes icónicos, la ciudad francesa se convierte en un verdadero imán para estrellas de Hollywood, deportistas, aristócratas y empresarios que eligen este rincón de la Riviera para vacacionar con estilo.
Club 55, donde fue vista la sobrina de Lady Di, es uno de los lugares más emblemáticos: fundado en los años 50, sigue siendo un punto de encuentro habitual para figuras internacionales, desde Brigitte Bardot hasta Beyoncé, lo que reafirma su exclusividad en cada temporada estival.
Fotos: Fotonoticias
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