Muchas veces creemos que para limpiar a fondo necesitamos productos caros o fórmulas especiales. Sin embargo, los mejores aliados para la limpieza del hogar suelen estar en la despensa: vinagre, bicarbonato, limón y otros ingredientes comunes tienen propiedades que ayudan a desinfectar, desodorizar y dejar todo reluciente.
Te contamos 7 trucos caseros fáciles y efectivos que podés probar hoy mismo:
1. Vinagre para los vidrios
Mezclá partes iguales de vinagre blanco y agua en un pulverizador. Aplicalo en ventanas y espejos, pasá un paño seco y vas a ver cómo quedan sin marcas ni manchas.
2. Limón contra la grasa
El jugo de limón disuelve la grasa acumulada en azulejos y mesadas. Frotá la superficie con medio limón, dejá actuar unos minutos y enjuagá con agua tibia.
3. Bicarbonato para desodorizar la heladera
Colocá un recipiente abierto con bicarbonato dentro de la heladera. Absorbe olores desagradables y mantiene el ambiente fresco por semanas.
4. Sal para manchas de café o vino
Si algo se derrama sobre un mantel o superficie de tela, cubrí la mancha con sal. Absorbe la humedad y evita que se fije antes del lavado.
5. Cáscaras de naranja para perfumar
Herví cáscaras de naranja o mandarina en agua. El vapor aromatiza la cocina y neutraliza olores fuertes como el del pescado.
6. Agua con vinagre para el microondas
Colocá un recipiente con agua y vinagre dentro del microondas y calentalo hasta que hierva. El vapor ablanda la suciedad y facilita la limpieza interna.
7. Bicarbonato en la alfombra
Espolvoreá bicarbonato sobre la alfombra, dejalo actuar media hora y luego aspiralo. Ayuda a neutralizar malos olores y refrescar las fibras.
Con estos trucos caseros no solo vas a poder ahorrar dinero al evitar la compra de costosos productos de limpieza, sino que también vas a reducir el uso de químicos agresivos que pueden ser dañinos para tu salud y para el medio ambiente.
La mayoría de estos consejos se basan en ingredientes naturales y fáciles de conseguir, como bicarbonato de sodio, vinagre o limón, que probablemente ya tengas en tu cocina. De esta manera, podés mantener tu hogar impecable, libre de olores desagradables y con un aroma fresco y agradable, todo de forma económica, sustentable y sencilla.
