Ácido hialurónico en crema: el secreto para una piel hidratada y luminosa – GENTE Online
 

Ácido hialurónico en crema: el secreto para una piel hidratada y luminosa

Este activo es el favorito de dermatólogos y expertos en belleza. Descubrí por qué su versión en crema es la más práctica y efectiva para mantener la piel suave, firme y radiante.
Lifestyle
Lifestyle

Hay ingredientes que se convierten en imprescindibles en cualquier rutina de cuidado de la piel, y el ácido hialurónico es uno de ellos. Desde que se popularizó, se ganó un lugar en las recomendaciones de dermatólogos, en los estantes de las farmacias y en el neceser de quienes buscan una piel hidratada y saludable. Aunque se puede encontrar en diferentes presentaciones, las cremas con ácido hialurónico se consolidaron como una de las formas más fáciles y efectivas de aprovechar todos sus beneficios.

La versión en crema del ácido hialurónico es la más práctica y efectiva.

La magia del ácido hialurónico radica en su capacidad para retener agua: puede absorber hasta mil veces su peso, lo que lo convierte en un verdadero imán de hidratación. Sin embargo, nuestro cuerpo produce menos de esta molécula a medida que envejecemos, y ahí es cuando empiezan a aparecer las primeras líneas de expresión y la piel pierde ese aspecto fresco y relleno. Una buena crema con ácido hialurónico puede ayudar a revertir ese proceso y devolverle a la piel el volumen y la elasticidad que va perdiendo con los años.

Una de las grandes ventajas de usarlo en formato crema es su practicidad. A diferencia de los sueros, que suelen ser más concentrados y requieren un paso extra en la rutina, la crema combina en un solo producto hidratación y tratamiento. Esto la convierte en una aliada perfecta para quienes buscan simplificar el skincare, pero sin resignar resultados. Además, es apta para todo tipo de pieles —incluso las sensibles— y puede aplicarse tanto de día como de noche.

El momento ideal para usarla es después de limpiar bien el rostro, con la piel ligeramente húmeda. Así se potencia su capacidad de retención de agua. Se recomienda tomar una pequeña cantidad y masajearla suavemente con movimientos ascendentes, desde el centro del rostro hacia afuera. No hay que olvidarse del cuello y el escote, dos zonas que muchas veces quedan fuera de la rutina y que también muestran signos de envejecimiento.

Un detalle importante: el ácido hialurónico necesita que la hidratación quede “sellada” en la piel para funcionar correctamente. Por eso, muchas cremas vienen enriquecidas con otros activos como ceramidas o aceites ligeros, que ayudan a evitar la pérdida de agua durante el día. Si la crema no contiene estos ingredientes, se puede complementar con un protector solar en la mañana o con un aceite facial por la noche.

Adoptar una crema con ácido hialurónico es una forma sencilla de invertir en la salud de la piel. Con el uso constante, los resultados se ven y se sienten: una textura más suave, un brillo natural y un rostro que recupera su aspecto descansado. Para quienes buscan un producto versátil, fácil de usar y con resultados visibles, este puede ser el primer paso para transformar la rutina de cuidado facial.



 
 

Más Revista Gente

Vínculo copiado al portapapeles.

3/9

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipisicing elit.

Ant Sig