Tener alfombras en casa puede darle calidez y estilo a cualquier ambiente, pero también puede convertirse en un dolor de cabeza cuando aparecen manchas. Entre el tráfico diario, los accidentes de las mascotas, un vaso de vino que se vuelca o el café que se derrama, mantenerlas impecables puede parecer misión imposible.
La buena noticia es que no necesitás gastar en costosos productos ni llamar a un servicio de limpieza profesional cada vez que algo ocurre: con algunos ingredientes caseros podés salvar tu alfombra y devolverle su aspecto original.
1. Actuar rápido es la clave
El primer truco es casi una regla de oro: mientras antes limpies la mancha, más chances tendrás de eliminarla por completo. Tomá un paño limpio o papel absorbente y presioná suavemente sobre la superficie para retirar el exceso de líquido. Evitá frotar, ya que esto puede hacer que la mancha penetre aún más en las fibras de la alfombra.
2. Vinagre blanco y bicarbonato, la dupla infalible
Para manchas de vino, café o jugo, mezclá partes iguales de vinagre blanco y agua tibia en un pulverizador. Rocía la zona afectada y dejá actuar unos minutos. Luego espolvoreá bicarbonato de sodio por encima: verás cómo hace efervescencia. Esperá a que se seque y aspirá los restos. Este método es uno de los preferidos porque neutraliza olores y limpia en profundidad.
3. Jabón neutro y agua para manchas de alimentos
Si se trata de salsa, chocolate o grasa, prepará una solución de agua tibia y unas gotas de jabón para ropa delicada o detergente neutro. Con un paño limpio, aplicá la mezcla y frotá en círculos de afuera hacia adentro. Enjuagá con un trapo húmedo para evitar que queden restos de jabón.
4. Alcohol para manchas de tinta
Si un marcador o birome arruinó tu alfombra, el alcohol medicinal es el mejor aliado. Humedecé un algodón y presioná sobre la mancha hasta que la tinta se transfiera al algodón. Repetí el proceso hasta que desaparezca por completo.
5. Neutralizar olores de mascotas
El pis de gato es uno de los accidentes más complicados de resolver porque, además de la mancha, deja un olor persistente. Para eliminarlo, primero absorbé el líquido, luego rociá con una mezcla de vinagre y agua (en partes iguales) y dejá actuar. Para terminar, espolvoreá bicarbonato y aspiralo cuando se seque. Este proceso neutraliza los olores y evita que la mascota vuelva a marcar el lugar.
Mantener las alfombras limpias no es imposible: con ingredientes que tenés en casa y un poco de constancia, podés prolongar su vida útil y conservar su aspecto como nuevo. Y si querés prevenir futuros accidentes, aspiralas al menos una vez por semana y tratá de limpiar las manchas siempre en el momento.
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