En los últimos meses, Lionel Messi, Rodrigo de Paul y Leandro Paredes han confirmado lo que ya venía gestándose en el universo fashion: los bolsos dejaron de ser un accesorio exclusivo de las mujeres para convertirse en una declaración de estilo masculina.
Desde clásicos de lujo hasta ediciones limitadas de alta costura, el bolso se posiciona hoy como pieza clave en el guardarropa de los nuevos referentes del deporte.
Entre los campeones del mundo, Lionel Messi fue uno de los primeros en sorprender. Al llegar al predio de la AFA, el rosarino captó todas las miradas con un exclusivo bolso de Hermès, el codiciado modelo Cargo Hac Birkin, una pieza de colección que ya había usado antes la China Suárez, regalo de Mauro Icardi.
En el caso de Messi, la elección del accesorio abrió el debate sobre cómo los grandes íconos masculinos empiezan a apropiarse de un complemento históricamente asociado a la moda femenina.
Rodrigo de Paul, por su parte, redobló la apuesta con modelos de Louis Vuitton y Gucci, que combina con outfits urbanos y relajados. Leandro Paredes también se sumó a esta tendencia, luciendo versiones más sobrias y deportivas de bolsos de lujo que acompañan su estilo cosmopolita.
Una tendencia que rompe moldes
Lo que antes podía leerse como una osadía, hoy es tendencia consolidada en pasarelas y en el street style internacional. Marcas como Dior, Fendi o Bottega Veneta llevan varias temporadas presentando bolsos en sus colecciones masculinas, borrando límites de género y reivindicando la funcionalidad sin perder sofisticación.
En este contexto, los jugadores de la Selección Argentina —figuras globales no sólo del fútbol, sino también de la cultura pop— funcionan como embajadores perfectos de esta nueva era de la moda. Al igual que en la cancha, marcan el ritmo y contagian estilo, demostrando que la seguridad y la autenticidad son las mejores credenciales para imponer tendencia.
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