La alfombra violeta de la premiere mundial de Otro viernes de locos 2 fue testigo de uno de los regresos más esperados de Disney, pero también de un juego de estilos que no pasó inadvertido: el de Lindsay Lohan y Jamie Lee Curtis, quienes reinterpretaron sus icónicos roles madre-hija con guiños de moda que podrían leerse como una postal de fiesta de 15.
Lindsay Lohan deslumbró con un look digno de una princesa moderna, mientras Jamie Lee Curtis apostó por la elegancia atemporal. Moda generacional, guiños a la narrativa de la película y un timing perfecto para el revival Y2K.
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La actriz de Mean Girls optó por un romántico vestido rosa bebé de la firma italiana Miu Miu, digno de una princesa moderna, mientras que Curtis se lució con un mini vestido rojo intenso, sobrio y con carácter de Balmain, que bien podría haber llevado una madre elegante en una noche inolvidable.
Juntas, volvieron a demostrar que la química entre ambas traspasa la pantalla, pero además, se convirtieron en uno de los dúos mejor vestidos de la noche. Dos generaciones de talento y estilo, celebrando el cine y la moda.
Las claves de los looks de fiesta de Lindsay Lohan y Jamie Lee Curtis: ideales para un outfit madre e hija de quinceañero
Lindsay Lohan y el vestido "princesa Y2K"
La actriz deslumbró con un vestido largo de gasa y falda plisada en tono rosa pastel, con cuerpo ajustado estilo corset, escote corazón y tirantes con brillos, de inspiración claramente romántica. El diseño, con sutiles aplicaciones de pedrería que caen en líneas verticales, aporta una caída etérea y movimiento al caminar, reforzando la estética “princesa Y2K” que volvió con fuerza en las alfombras rojas más recientes.
Este look se inscribe dentro de una microtendencia que viene ganando terreno en el universo del glam: el regreso del “soft glam” con aires de cuento de hadas. El largo, el color pastel, el tul vaporoso y los detalles brillantes son guiños directos a ese revival de los 2000 que combina nostalgia con sofisticación.
En cuanto al beauty look de Lohan, destacan las ondas marcadas en el pelo suelto de la estrella de Hollywood, peinado hacia un costado, y su make up luminoso en tonos duraznos.
Finalmente, la artista completó su look con un collar tipo choker de diamantes, unos aros con caída y un divertido clutch con forma de micrófono recubierto por pedrería que terminó de sellar una imagen digna de una quinceañera en versión Hollywood.
Jamie Lee Curtis: minimalismo power y escote estructural
Por su parte, Jamie Lee Curtis apostó por un vestido mini de manga larga, en un tono rojo vibrante, con escote diagonal y estructura drapeada que cruza el torso y estiliza la figura con un exquisito juego visual. Un clásico de la marca francesa Balmain.
La silueta marcada y los hombros levemente armados actualizan una estética ochentosa con toques modernos, mientras que la elección del largo, por encima de la rodilla, le permitió mantener frescura y no competir con Lohan, generando un match estilístico equilibrado.
El diseño encaja perfectamente con una de las microtendencias más vistas entre mujeres +40 en la red carpet: vestidos al cuerpo con cortes geométricos, minimalistas pero de impacto, que celebran la figura sin recurrir a excesos.
Finalmente, Jamie Lee Curtis completó su estilismo con unos stilettos nude que sumaron elegancia sin competir con el color protagonista, y su corte pixie plateado coronó un look en el que transmitió seguridad, estilo y madurez con identidad propia.
Fotos: Redes
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