Lejos de las alfombras rojas y de la agenda institucional, Juliana Awada encontró este año en sus viajes por el verano europeo y su escapada a Cartagena el escenario ideal para reafirmar algo que ya es marca registrada: su estilo relajado, sofisticado y atemporal.
Con looks pensados para el día a día, pero siempre cuidados al detalle, la ex primera dama volvió a marcar tendencia y, casi sin proponérselo, adelantó varias de las claves que dominarán el verano 2025/2026.
Entre paisajes mediterráneos, calles empedradas y postales costeras, Awada desplegó una guía de estilismos que dialogan con el clima cálido y la estética effortless chic. Prendas nobles, siluetas cómodas y una paleta cromática serena son algunos de los pilares que atraviesan sus elecciones.
La guía de looks de verano predilecta de Juliana Awada
Uno de los grandes protagonistas de sus looks es, sin dudas, el blanco. Vestidos lenceros de líneas limpias, telas livianas y caída natural se convierten en aliados perfectos para las altas temperaturas.
Este recurso no solo aporta frescura, sino que refuerza una idea de elegancia minimalista que nunca pasa de moda. El blanco, además, funciona como base neutra para sumar accesorios artesanales, relojes clásicos o sandalias planas de cuero.
Sobre esa línea, bolsos de fibras naturales, sombreros de rafia, sandalias planas y lentes de sol clásicos completan estilismos donde menos es más. Cada elección parece pensada para durar más de una temporada, reafirmando una visión de la moda consciente y atemporal.
El denim aparece como otro eje fundamental en su guardarropa de verano. Desde mini shorts de jean combinadas con camisas blancas hasta bermudas XL simples llevados con prendas amplias, Juliana reafirma el poder de este material como comodín absoluto. El jean, en versiones descontracturadas y sin excesos, se perfila así como una de las grandes apuestas de la próxima temporada, siempre asociado a siluetas relajadas y combinaciones naturales.
Las camisas merecen un capítulo aparte. Oversize, de algodón liviano o lino, Awada las lleva abiertas, anudadas a la cintura o con mangas arremangadas, sumando un gesto estilístico que aporta movimiento y frescura.
El recurso del nudo o el amarre se consolida como una microtendencia clave: define la silueta sin rigidez y suma un aire despreocupado que funciona tanto para la playa como para paseos urbanos.
En cuanto a la colorimetría, predominan los tonos neutros y terrosos: beige, crudo, camel y negro, combinados con acentos de color sutiles como el rojo coral o el azul. Esta paleta dialoga con el entorno natural y refuerza una estética serena, alineada con el lujo silencioso que Awada representa a la perfección.
