En el Río de la Plata, a solo dos horas de viaje desde la Ciudad de Buenos Aires, se esconde un lugar que combina naturaleza, historia y misterio. Se trata de la Isla Martín García, un destino de apenas 1,84 kilómetros cuadrados que fue escenario de batallas, cárcel de expresidentes y hasta refugio frente a epidemias, pero que hoy se presenta como un verdadero santuario ecológico.
La isla fue avistada por primera vez en el siglo XVI y, desde entonces, formó parte de momentos clave de la historia argentina. Por sus senderos caminaron figuras como Hipólito Yrigoyen, Juan Domingo Perón y Arturo Frondizi, quienes estuvieron detenidos en su presidio. Todavía puede recorrerse el empedrado hecho por presos, el antiguo lazareto levantado en 1874, el faro, el histórico teatro —hoy centro comunitario— y un cementerio cargado de leyendas.

En 1974 la isla fue declarada Reserva Natural, y en 1998 recibió la categoría de Reserva Natural Provincial de Uso Múltiple. Su flora incluye especies como ceibos, laureles criollos, espinillos y coronillos, mientras que su fauna sorprende con carpinchos, nutrias, lagartos, tortugas acuáticas y más de 200 especies de aves. Por esta riqueza, es un paraíso para fotógrafos y observadores de la naturaleza.
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Las actividades son variadas: caminatas por los senderos, paseos en bicicleta, kayak, visitas guiadas y recorridos por la laguna y las playas. También se puede conocer la panadería local, famosa por su pan dulce, y disfrutar de la cocina casera en la hostería y el camping. Por la noche, la escasa luz artificial regala cielos estrellados imposibles de ver desde la ciudad.

Cómo llegar a la Isla Martín García
El acceso más común es desde Tigre o Puerto Madero, a través de servicios de lanchas turísticas que ofrecen excursiones completas con guías, comidas y actividades. El viaje dura aproximadamente dos horas y permite combinar la travesía por el Río de la Plata con la visita a la isla.
Otra alternativa es llegar con embarcación propia, aunque al tratarse de una reserva natural, el desembarco está permitido únicamente en áreas habilitadas. En todos los casos se recomienda planificar con anticipación y consultar los servicios disponibles según la temporada.


