Esta medida pretende facilitar a los empresarios la contratación de extranjeros en sus países de origen y permitirá a los extranjeros ilegales regularizarse y trabajar.
En las últimas horas, el Consejo de Ministros de España aprobó la reforma del reglamento de la Ley de Extranjería, que había sido anunciada hace tres semanas, y que permitirá incorporar miles de extranjeros al mercado laboral.
Esta medida pretende facilitar a los empresarios la contratación de extranjeros en sus países de origen y abre nuevas vías para que los inmigrantes que ya vivan en España puedan regularizarse y trabajar.
Según el impulsor de la iniciativa, el ministro de Migraciones, José Luis Escrivá, esta reforma es una fórmula para aflorar la economía sumergida y paliar la falta de mano de obra en sectores clave para la economía, desde el transporte y la construcción, pasando por la hostelería o la digitalización.
Si bien el funcionario evitó dar cifras sobre los extranjeros que pueden beneficiarse de la reforma, su impacto puede alcanzar a decenas de miles de personas, entre ellos muchos argentinos. El decreto que se publicó este miércoles en el Boletín Oficial entrará en vigencia en 20 días.
La medida española contempla un abanico de pequeñas modificaciones técnicas que harán algo más fácil emprender, reagrupar a familiares o regularizarse cuando se está trabajando en negro, pero, sobre todo, trae novedades importantes en tres ámbitos clave para avanzar en un cambio de política migratoria:
Otra de las novedades consiste en crear una figura legal para que inmigrantes que lleven en situación irregular en España al menos dos años tengan una vía para obtener sus papeles. Se trata del arraigo por formación con el que se ofrecerá una autorización de residencia para formarse en ocupaciones en las que se necesita mano de obra y que, posteriormente, permitirá trabajar si el extranjero consigue un contrato de trabajo.