María Julia Oliván continúa internada en el Hospital Alemán, donde ingresó de urgencia hace dos semanas tras un accidente doméstico que sufrió. Terminó con el 25% de su cuerpo comprometido con quemaduras de alto grado y ahora se recupera desde el centro de salud, donde deberá permanecer por un mes.
Este fin de semana, por primera vez la periodista mostró cómo quedaron sus manos, producto de lo ocurrido. Aclaró: "Mis manos, lo más sano que tengo".
Y luego detalló: "16 días de terapia intermedia. 5 intervenciones. Fiebre, todos los días, solo por la inflamación de la herida más grande de la pierna. Glóbulos blancos normales”, comenzó escribiendo en una historia de Instagram.

Más adelante, Oliván lamentó no poder estar presente para su hijo en estas semanas: "Antonio, que cuando viene, se quiere ir y nadie le enseña que a la mamá se la acompaña (que mejor momento para crecer que con la vida misma)", manifestó.
Y cerró lamentando: "Y yo, acá, sin poder siquiera pararme para hacerle los dibujos y enseñarle. Difícil ser tan fuerte como para superar los obstáculos físicos y soledades emocionales".
Horas más tarde, compartió otra fotografía en la que aparece su pequeño hijo acompañándola en el hospital y pasando un tiempo en familia para hacer más ligero su proceso de internación.

Los detalles del accidente que sufrió María Julia Oliván
Dos semanas atrás, la periodista contó detalles del accidente que sufrió en la sede de "Border Periodismo", su espacio de trabajo que además considera su segundo hogar.
Oliván intentó encender una chimenea, que según dijo, funciona a base de etanol. "Le empecé a meter etanol, y más etanol, y más etanol... cuestión de que me prendí fuego. Me agarró una llamarada en todo el cuerpo", relató María Julia desde el centro médico, describiendo el aterrador momento que vivió.

Tras el episodio, la comunicadora fue trasladada e internada en el Hospital Alemán, donde se mantiene en terapia intermedia desde hace dos días, recuperándose de las heridas. Según su propio relato, el incidente le causó quemaduras que comprometen el 25 por ciento de su cuerpo.
Para su fortuna, en el momento del incidente no se encontraba sola, y eso la ayudó a tener una acción rápida frente a lo que estaba ocurriendo. "Valu estaba trabajando conmigo... y ella me salvó prácticamente la vida porque me dijo instantáneamente que me saque la ropa", contó Oliván, aún impactada.

