Categorias: Actualidad

“Le pedí a mi hijo Toto que me entregue a Fabi en el altar”

Publicado por
Redacción Gente

De haber sabido que la última escena de Diario de una pasión desataría otra no menos desgarradora –y un trailer de tantas más afortunadas–, Nick Cassavetes habría considerado una secuela. “Estaba recién separada cuando la vi (2005). Me agarraba de los marcos de las puertas doblada por el llanto. ¡Yo deseaba un amor así!”, describe durante el primer quiebre de esta charla “tan Edith” (su segundo nombre, el que suele usar cuando se versiona en crudo). Desde entonces libró un match encarnizado con su soledad. Hasta que pudo sujetarla del cuello y mirarla a los ojos: “A ver, hija de puta, ¿cómo seguimos?”. El amor de su vida llegó con los 40. “Fabi (Mazzei, 47) curó mi espíritu”, asegura Araceli González (46) dos años después de haberse dado el alta de la terapia con la que exorcizó los daños de otro amor. Y, entonces, en desafío a aquel director, al destino y a su historial, iniciaba la precuela del film que hoy titula “Me caso”.

–Y la gran pregunta es: “¡¿Por qué?!”.
–Porque lo merecemos. Nuestra boda será la celebración de los sobrevivientes.

–¿Qué batalla libraron?
–Básicamente, la del prejuicio. Los primeros años de mi relación con Fabi fueron difíciles. Yo venía de romper un vínculo fuerte, una pareja muy envidiada, a la que la gente veía casi como un mito. Por lo que volver a verme enamorada podía sonar a mentira. El bombardeo fue devastador. Llegaron a hablar de pantallas, de que en realidad yo salía con un político, que él no estaba a mi altura y comentarios como: “Que se olviden de volver a trabajar en televisión”. Y eso que nos afectaba, finalmente nos fortaleció.

.....................................................................................................

Apoya su taza de café sobre Galería Celestial, la recopilación de mandalas y otros dibujos sagrados de Romio Shrestha, libro que gobierna la mesa baja de su living, sobre la que se acomoda. Repasamos sus lecciones matrimoniales “La primera vez me casé por obediencia: estaba embarazada. La segunda, por insistencia o tal vez obsesión (ajena). Comenzaba a tomar otros rumbos. Ahora siento que realmente elijo dar el ‘sí’, el más sensato y convincente”, distingue entre sorbos de su espresso.

–¿Cómo se propone casamiento a los 46?
–Tiene otro sabor: sin exigencias ni formalidades. Fa me había escuchado decir en una entrevista que mi hijo (Tomás “Toto” Kirzner, 15) me pidió que nos casáramos. Y charlando frente al mar de Playa del Carmen, donde quisiera terminar mi vida, fluyó: “¿Por qué no damos el paso?”.

......................................................................................................

Leé la nota completa en la edición 2501 de Gente.

“Fabi y yo merecemos casarnos. Será como la celebración de los sobrevivientes... Los primeros años de este amor fueron difíciles. Pero el bombardeo de versiones y prejuicios no hizo más que fortalecernos”

Hace ocho meses, Tomás “Toto” Kirzner (15) confesó estar “muy enamorado”. Desde entonces, Lola Barbano (13) frecuenta su casa, donde pasa horas escuchando sus ensayos con el bajo. Florencia Torrente (25) lleva poco más de un mes de convivencia, y dos años de novia, con Tomás, de bajísimo perfil, a quien conoció a los 7 años en el colegio de Ramos Mejía y hoy trabaja en el albergue transitorio de propiedad familiar. “Muero por ser abuela, pero Flor me dice que no cuente con ella hasta después de los 30”, confiesa Ara.


“El sexo hoy es alucinante, sin la presión de marcar tarjeta y como complemento de otros tantos aspectos. Para una mujer de mi edad, es fundamental un buen compañero en la vida y en la cama”