Nick Cordero, el actor de 'La ley y el orden', despierta del coma después de la amputación y el coronavirus

Publicado por
Germán Pittelli

Luego de la dura batalla que libró contra el Covid-19 –que casi le cuesta la vida–, su mujer compartió en las redes sociales una buena noticia: Nick consiguió despertarse del coma, en el que llevaba 42 días.

El 31 de marzo Nick Cordero (41) había sido ingresado en el Centro médico Cedars-Sinai de Los Ángeles, California con problemas respiratorios compatibles con una neumonía. Al día siguiente de su ingreso, le informaron lo que no quería escuchar: que había dado positivo por coronavirus. Sin embargo eso no fue lo peor.

El actor de 41 años, conocido por musicales de Broadway y series como Blue Bloods o La ley y el orden, lucha contra el coronavirus desde el pasado 31 de marzo, en el hospital Cedars-Sinai Medical Center de Los Angeles.

Durante las semanas siguientes su esposa, Amanda Kloots -quien iba informando sobre el estado de salud del actor- el cual iba empeorando a medida que pasaban los días, llegando incluso a tener que amputarle una pierna debido a varias complicaciones sufridas a causa del virus. Hasta hoy, el actor estuvo en coma inducido para que "pueda soportar su corazón, pulmones y riñones", señaló su mujer..

Ahora, después de la dura batalla que libró contra el coronavirus y que estuvo a punto de costarle la vida, su mujer compartió en las redes sociales que Nick logró despertarse del coma en el que llevaba 42 días:

“Es un verdadero superhéroe. Quiero decir, recorrimos un gran camino. Él está allí y todo se ve bien. Es como si no quisieras emocionarte demasiado porque fue un camino así. Pero por eso digo que todavía es un camino muy largo. Todavía estamos en un camino muy largo, pero estamos en los comienzos de la recuperación”, compartió su mujer muy emocionada.

La explicación médica de por qué le amputaron una pierna

Cada vez hay más evidencia que apunta a que el COVID-19 puede extenderse mucho más allá de una enfermedad respiratoria. “No es una gripe”, es una de las frases más repetidas estos días, tanto por pacientes como por médicos.

La enfermedad de Nick Cordero derivó a complicaciones de coagulación y los médicos tuvieron que amputarle la pierna derecha, tras intentar salvarla con distintos anticoagulantes.