Con sólo 24 años, la magnética actriz de mirada inquietante atrajo a 62 millones de espectadores. Eso sí, muy pocos saben que cuando se apagan las cámaras ella insulta en español.
A Anya Taylor-Joy (24) “se le rompió el corazón” la primera vez que leyó –en tan sólo una hora– el libro original de Gambito de dama, y a su vez dentro de ella surgió una peculiar idea que no dudó en comentar con los guionistas: “En el libro, Beth tiene cabello castaño. Pero sentí que necesitaba tener el pelo rojo. Me gustaba la idea de que sin importar dónde estuviera, e incluso si estaba tratando desesperadamente por encajar, seguiría sobresaliendo”. Y así fue: su corta melena colorada la acompaña en las dos décadas en que transcurre la miniserie (1950 y 1960).
Pensando en su personaje, también confesó que “le gusta mucho lo extrañamente asexual que es”, y que en su mente “ella tiene un poco de TOC”.
Pero Beth no es su primer personaje. Para nada. En sólo cinco años, ella interpretó a 22 personajes y llegó a sentir que se había perdido a sí misma y que no sabía quién era. ¿Quién es ella? Acá, una serie de hechos y frases que la dejan al descubierto.
“Antes de ‘Gambito de dama’ no tenía ningún conocimiento de ajedrez. Bah, creo que había intentado jugarlo una vez, cuando tenía nueve años. Fue Bruce Pandolfini, un maestro del tablero, quien me enseñó todas las secuencias como si fueran bailes. Y, como soy bailarina, eso fue de gran ayuda”.
“Sí tengo que definir de dónde viene mi actitud de vida y mi calidad como persona, es de la Argentina”.
“Si vieron el musical 'Wicked', la protagonista, Glenda, es la más popular del mundo, y por otro lado está Alpheba, que es verde. Siempre fui Alpheba. Pero yo soy comediante, actriz, y quería demostrarle al mundo (y a mí misma) que puedo meterme en la piel de cualquiera”.
“Creo que nunca me sentiré una persona hermosa y no creo que sea lo suficientemente hermosa para estar en películas. Suena patético, y mi novio me advierte que la gente va a pensar que soy una idiota por decir estas cosas, pero creo que tengo un aspecto extraño”.
“Tilda Swinton es un referente enorme para mí como mujer, actriz, artista y ser humano. Además, vive en un castillo con su marido y su amante. Tilda, ¡te quiero!”.
Por Kari Araujo.
Fotos: Gentileza Netflix y Archivo Grupo Atlántida.
Agradecemos a Agustina Benvenuto.