Milton Glaser fue un maestro del diseño gráfico. Nunca quiso cobrar por aquel trabajo, que contribuyó a rescatar la imagen decadente de New York de fines de los Setenta.
Podría decirse simplemente que murió el ideólogo del célebre logo “I Love NY”, y no estaría nada mal, porque convirtió a su creación en un ícono de la ciudad que lo vio nacer, pero Milton Glaser (91) fue mucho más.
Nacido el 26 de junio de 1929 en el Bronx, el futuro diseñador gráfico, que provenía de una familia judía húngara, colaboró década tras década a cimentar, a partir de sus treinta años de edad, la identidad visual popular de su ciudad, pero también de todos los Estados Unidos.
No sólo fundó a fines de los Sesenta, y junto a Clay Felker, la gran revista americana New York e hizo escuela a partir de su estilo alegre y descontracturado de colores fuertes, sino que además entregó trabajos legendarios, como la silueta de Bob Dylan con toques psicodélicos en su cabello, para un afiche promoción del músico, o el logo de la editorial de historietas DC Comics. Y así con infinidad de creaciones.
Todas, claro, aparte de la icónica frase “I Love NY” acompañada por el corazón, que diseñó en 1977 con letras de máquina de escribir: una síntesis de su sencillez y calidad llevadas al arte, y una creación que entregó a su ciudad de manera gratuita.
En 2009 el presidente estadounidense Barack Obama le entregó la Medalla Nacional de las Artes: nunca antes un diseñador gráfico la había recibido. Once años después, finalmente partió tras un derrame cerebral seguido de una insuficiencia renal, según informó su mujer Shiley.
