El actor y cantante rosarino confiesa que desde chico fue rebelde y disruptivo, por lo que aceptó sin problema participar de la sección Sin Filtro -producción sin retoques-. de GENTE. Bajo ese marco habló de su debut en la televisión en un formato reality, su pasión por la medicina y el personaje de "jurado malo" que hoy disfruta mucho interpretar.
El actor y jurado "malo" del reality show 'Canta conmigo ahora', Alejandro Paker, se animó a protagonizar una producción para la categoría 'Sin Filtro' de GENTE online que se caracteriza por un detalle que no es menor: sus fotos son sin retoque, no se usa photoshop. Bajo ese marco, el reconocido actor teatral de 51 años habló de su incursión en la televisión, de su experiencia en el ’Canta conmigo ahora’, y de su perseverancia desde chico para poder vivir de lo que ama: actuar.
“Me habré parada con un 1% de todos los participantes que pasaron por el concurso”, confiesa a GENTE entre risas, el jurado más difícil y exigente del ciclo de Marcelo Tinelli , mientras lo peinan y maquillan para la producción de fotos en la que el actor lucirá tres espectaculares looks que, hasta el momento, no usó en el concurso de canto.
Alejandro Paker es un referente del teatro musical en el país. Con más de 30 años de trayectoria, el actor y cantante rosarino expresó que desde hace ”mucho tiempo” tenía ganas de participar de “proyectos audiovisuales”.
Con decenas de obras teatrales en su haber - El jorobado de París; Casi normales; Priscilla, la reina del desierto; Cabaret, entre muchas otras-, el rosarino señaló que la actuación llegó a su vida “de contrabando”.
-Mirá, estábamos, hablo en plural porque trabajo en equipo con mis representantes -Diego, Alejandro y Leo Farrels-, aceptando proyectos audiovisuales todo el 2021. Protagonice una película con Adrián Navarro (La leyenda del cóndor ciego), después empecé con ‘El encargado’, serie que protagonizo con Guillermo Francella, dirigida por Gastón Duprat, y luego de los 7 meses de grabación, pase a protagonizar Selenkay, una serie de Disney +. Y esto no es todo: también participé del proyecto de Robert De Niro, ese mismo que lo trajo a filmar a la la Argentina. ¿En síntesis? Estaba muy ocupado cuando recibí la propuesta de Marcelo Tinelli pero me encantó de inmediato.
-Nos llamaron el Chato Prada y Fede Hoppe para preguntarnos si estaba disponible y si me interesaba participar del ‘Canta conmigo ahora’. Y bueno, yo nunca participé de un formato reality, y la verdad que tenía dudas....
-La verdad es que sí, tuve que pensarlo. En realidad yo lo consulté con mis representantes porque la agencia de ellos tiene a varios artistas que participaron en el ‘Bailando’ y otros realities. Así qué hay buena relación con la producción, con la Flia y me aseguraron que se iba a dar una situación buena y que iba a sumar y no restar en mi carrera.
-Si, es verdad pero la propuesta de Canta conmigo ahora justo llegó en un periodo en el que lo audiovisual había cobrado protagonismo era algo que yo venía buscando y deseando hace tiempo. Lo venía buscando y no se daba. Igual para mí el teatro es muy importante y he tenido la bendición de tener proyectos grosos, musicales muy grandes: Casi normales; Priscilla la reina del desierto; Como el culo; y luego vino la propuesta de Marcelo Tinelli.
-En realidad yo no veo televisión, soy un bicho muy raro, pero obviamente siempre me llegaba el feedback o veía las redes. Tengo amigos también que participaron de algún programa y siempre me informaba a través de ellos.
-Pero es divertido que así sea aunque, a lo mejor, el hecho artístico del programa donde uno quería ver actores actrices bailar por primera vez pasa a segundo plano. Yo creo que algunos amigos mios padecieron ésto pero a mi no me pasó porque ya tenía la información, no me tomó de sorpresa. De hecho, soy muy amigo de Aníbal Pachano asi y vi de cerca todo su proceso y las situaciones que pasó en el Bailando por un sueño.
-Sí, así fue. Por eso, viendo todas las variables -y me hago cargo de algunos prejuicios que uno carga encima- dudé un poco en aceptar la propuesta pero, finalmente, consideré que valía la pena vivir esta gran experiencia, ponerle el cuerpo y entender realmente cómo funciona.
-Me sentí re bien tratado. El formato además es absolutamente distinto al ‘Bailando’. Está supervisado por la BBC de Londres. Lo que estoy recibiendo está muy bueno, y me gusta, sobre todo el amor/odio que recibo en las redes (se rie)
-No, pero en realidad me causa intriga que la gente piense que soy malo sólo porque opino diferente al resto del jurado. Entiendo que, muchas veces, la opinión diferente me convierte en el villano. Como que estás en contra, sos el malo. Pero es simplemente otra opinión y no tiene que relacionarse con algo negativo. Pero bueno, es la forma en que se interpreta la opinión diferente en estos tiempos.
-Es que es una cuestión de opinión. No tiene que ver con ser estricto o malo, porque son 100 opiniones y no todos se paran siempre. Es un programa democrático.
-(Se ríe). Bueno me habré parado unas 5 veces, sólo con 1% de todos los participantes que pasaron. Puede ser que sea un poco exigente.
-Son todos muy buenos, porque acá el nivel de cantantes es de aficionados a profesionales. Hay una vara alta, y para mí por lo general son profesionales que técnicamente ya están muy bien. Pero yo pongo la mirada más afilada en la interpretación. El "personaje" mio de villano es porque ‘estoy en el detalle dentro del detalle’. Eso es una frase de Peter brookes, mirá a quién se la robé, no se la robé a cualquiera (se ríe).
-No me preparé de ninguna forma en especial: fue natural y espontáneo. Y mira qué soy amigo de Aníbal Pachano y Polino.
-Hablamos, pero de este tema no. Ellos me conocen y saben que yo hago mis propias construcciones.
-De Marcelo me sorprende su nivel de escucha y su nivel de improvisación. En mi caso, cómo me potenció, con solo nombrarme sin necesidad de feedback. Es como que él está generando también como una especie de expectativa para ver si yo me pongo de pie o sigo sentado y eso está bueno: se nota la experiencia que tiene el poder para comunicar.
Yo creo que mi participación no es tanta en el programa pero lo que Tinelli genera entorno a mi participación lo hace ver más grande de la que es. Eso a mi me sorprende en el efecto inmediato, en masa.
-Lo conocí ahora. Canté algunas veces en algunas galas en el ‘Bailando’ o participando de alguna apertura. Siempre fui figurita invitada en el programa, pero nunca había tenido un ida y vuelta con él.
-Si, claro: primero me puse nervioso (se ríe). Me preguntaba: ‘¿Qué respondo?!’. Me parece que se requiere y exige tener velocidad y aparte ponerle humor cuando uno interactúa con él. En cuestión de segundos tenés que dar una devolución, ser chistoso y marcar una línea.
-No porque perdiste tu oportunidad y se va con los otros 99 jurados. Yo igual en los primeros programas me sentí nervioso por la autoexigencia que sentía. Pero después me fui relajando.
-Bueno, yo le decía a la maquilladora que todavía no me vi.
-Bueno yo estoy muy atento a las redes y ese es un parámetro también. Analizó desde la imagen, la manera de decir las cosas, voy viendo como se reciben y en esa medida voy deduciendo qué funciona y qué cosas dejar, o mejorar. Lo voy cocinando programa a programa.
Además, también juego con mis compañeros. Porque hay compañeros del jurado que me empezaron a retrucar, como el Puma Rodríguez. Qué me pone en jaque mi opinión, entonces es ver de qué manera contestar sin ir a la confrontación.
-Con Cristian Castro, El Puma, Coti, con L-Gante, Manuel Wirtz, El Tirri, La Bomba Tucumana y El Bahiano.
-Bueno con L-Gante me pasó algo muy lindo y tierno. Nuestro feedback de compañeros y su participación en el programa me gusta mucho: me encanta su mirada, por ejemplo. Yo lo siento y lo escucho todo el tiempo conectado con sus compañeros, con el participante y con Marcelo. Se lo siente y se lo escucha muy real. Siempre tiene una palabra con mucho respeto, mucha educación y honestidad. Lo escucho con un nivel de honestidad que me enternece mucho.
-Antes de empezar a grabar siempre se acerca y halaga todos mis looks. Me dice: "Che qué bueno eso que tenes puesto’". Ya le pase el teléfono del diseñador que diseña mi vestuario, porque me dijo "Yo solo una vez use un saco’" y yo que uso bastante sastrería le pasé algunos datos. Le gustó mucho un saco que usé con plumas y le dije que le pasaba el contacto de Jorge Sandoval para que le intervenga las camperas que el usa. Y así se dio nuestro primer intercambio, yo pasándole a L-Gante el contacto de un diseñador para que trabajen y ver otra imagen.
-La verdad que sí. Antes que nada, yo no soy prejuicioso, si bien, en el teatro hay bastante prejuicio con otros lenguajes. Yo he hecho todo tipo de lenguajes a lo largo de 30 años de profesión, me enriquezco de todas las aristas.
-Es un trabajo diario. Tengo presente una frase que me dice una amiga todo el tiempo ‘Ojo amigo que estás con el ego muy arriba y él autoestima muy abajo’. Y eso me doy cuenta que tiene que ver cuando mi ego se potencia y me siento inseguro de algo. Pero creo que en los últimos años, sobretodo la pandemia, me ubicó muchísimo, los patitos como diría pachano (se rie).
-Yo creo que esto lo tienen claro los 100 jurados. En el programa está claro el rol de cada uno y el lugar que ocupa cada uno dentro del canta conmigo ahora. Creo que no estamos tan a la defensiva de que alguien te quiera sacar el lugar.
-No, no. La verdad que acá todos son artistas consagrados. Acá nadie tiene que conseguir un lugar, todos tienen un lugar designado en el programa como profesionalmente. Algo qué hay que remarcar es que acá las figuras no compiten entre ellas, como si sucedía en el bailando que se competía por el destaque y por el concurso, acá no.
-Bueno eran como 8 horas de grabación mínimo al día. El día a día se vive con absoluta paz, todos nos queremos sacar fotos con todos. Aparte hay una carpa donde estamos la gran mayoría del elenco, y se genera como una peña. Somos como 80 que convivimos en la carpa y estamos todo el tiempo cantando, comiendo y tomando, se genera algo muy fraternal.
-Y… una horita, horita y media de armado tenemos. Entre el pelo, el maquillaje y el vestuario, de Jorge Sandoval y Valentina Mallor que me ayudan a componer el personaje.
-Tiene que ver con algo con lo que yo me siento seguro. Yo me amparo mucho en el vestuario y en el maquillaje para componer el personaje, es algo que genera un efecto notorio en el público, me pasa en el teatro y yo sabía que iba a suceder en la televisión. Por eso le doy tanta impotencia y dedicación al pensamiento del look.
-Sí. Ahora si, ya me gustó (se ríe). Esto me gustó.
-Bueno, amplió más mi imagen, me está conociendo gente que no consume teatro o qué no va al teatro. Eso seguro.
-¡De todo! (Se ríe). Desde puteadas: ‘Hijo de puta parate’, hasta ‘sos un genio, no te pares nunca’. Pero tomo todos los comentarios o reacciones como un halago, porque hacer que un otro reaccione a un personaje que construí para mí es una misión cumplida. Porque yo cuando actúo busco que te sientas interpelado, despertar o invitar a la reflexión. Generar algo en el otro con mi trabajo.
Alejandro Paker recordó con GENTE cómo fueron esos años de adolescente en los que le mentía a sus padres que iba a nadar o a cantar en el coro del colegio, pero en realidad iba a tomar clases de actuación. “Gratis, porque no había dinero para actuar, sí para otras cosas”, señala el actor entre risas mientras detalla la trama secreta de sus inicios actorales.
“En mi casa siempre se respiró arte. Mis viejos me llevaban a obras de teatro, ópera, musicales(…) Me enseñaron a ser un buen espectador y a ser ecléctico desde un punto de vista artístico”, contó sobre su primer acercamiento en el mundo artístico. De cuando sus padres lo dejaban en el cine viendo películas de autor todo el día.
Sobre esa línea, el actor, que debutó con el ’Jorobado de Paris’ en un Luna Park “lleno con más de cinco mil quinientas personas”, contó que sus padres se enteraron que estudio actuacion un año después, luego de invitarlos a la muestra anual. ”Estaban como locos, sin saber qué pasaba, cuando me vieron abrir la obra”, recuerda entre risas.
-¡Noo…! Me dijeron que podía actuar pero que tenía que tener una carrera convencional hecha. Así que arreglé con mis padres estudiar medicina.
-No, no terminé. Abandoné la carrera cuando me vine a Buenos Aires siguiendo mi sueño actoral. Igual me gustaba la medicina, de hecho disfruto del tema. Mis padres me veían trayendo niños al mundo, porque me gustaba mucho la obstetricia. Yo quería ser ginecólogo.
-Se enteraron mucho después. Se molestaron, pero qué iban a hacer, ya estaba a kilometros de distancia (se ríe).
-Bueno la verdad que al principio se resistieron. Recuerdo que siempre que los invitaba a estrenos de mis obras elogiaban todo pero, respecto a mí, nunca sentía esa validación que buscaba en ellos. Me veían médico (…) respeté su proceso, obvio, pero dejé de invitarlos.
-No, hoy mi mamá es mi fan número 1. Ella ve mucha radio y televisión y es la primera que me llama y me dice: "Hoy estuvo Susana Roccasalvo y dijo que fue a verte al teatro y estuviste genial" es la que me pasa los partes mediáticos del día. Así que destaquemos también que ya tuvo su proceso y me acepta.
-Me dice ’no entiendo por qué te dicen el malo. Si estás proponiendo otras miradas. No me gusta que digan eso de vos’ y le digo que no se preocupe que es parte del show (se ríe).
Fotos: Fabián Uset @fabianusetph
Diseños: Jorge Sandoval @jorgesandovaldesigner
Botas: Giuliana Buenos Aires (giuliana.bsas) y Zapatos Talle Grande (@zapatostallegrande)
Mitones: Vos Desapercibida (@vosdesapercibida)
Polera: Facundo Franzolini (@facundo_franzolini)
Estilismo: Valentina Mayol y Camila Mombreani (@valchumm y @ca.mombreani)
Maquillaje: Kar Fakiel (@karfakiel)
Peluca: El Mundo de las Pelucas (@elmundodelaspelucas) (@guillermo_liz_)
A.P.: un especial agradecimiento a mi amiga Miriam LANZONI @miriamlanzoni