Marcela Feudale habla de la especial relación que tiene con su mamá

La legendaria locutora de Marcelo Tinelli habló a corazón abierto sobre su intimidad.

Publicado por
Leandro Mazza

Se puede decir que la vida personal de Marcela Feudale es un verdadero enigma. Pero en el último tiempo, también a raíz de su participación en el panel de LAM, fue rompiendo esa barrera de la intimidad para dar a conocer su costado más íntimo. Habló de su presente sentimental, pero también lanzó importantes definiciones sobre la especial relación que tiene con su mamá y reveló los motivos por los que decidieron vivir juntas.

“Tenemos un vínculo muy estrecho”, confesó hace un tiempo en diálogo con La Nación. “He tenido mi departamento y fui y vine, pero no me molesta vivir con mi mamá porque siempre fui muy independiente”, contó.

Durante la pandemia, la locutora abandonó varios trabajos y rechazó otros para quedarse en su casa y no exponer a su mamá a un posible contagio de coronavirus.

La legendaria locutora de Marcelo Tinelli destacó que a pesar de vivir con ella “puede hacer su vida” porque sus padres nunca fueron invasivos.

A mi ellos me acompañaron en “mi crecimiento. Traté de acercar posiciones entre las cosas que ellos pretendían y las que yo quería, y nos llevamos bien. Es una negociación permanente. Siempre fui un alma muy libre, no me gusta que me aten y quizá por eso nunca me casé ni tuve hijos, porque en cuanto me siento atada me voy o me deprimo”.

El emotivo recuerdo de Marcela Feudale sobre su papá

“Mi papá falleció en el 2004 y me acompañó mucho, siempre me apoyó. Cuando quise estudiar locución fui a rendir al ISER y me fue mal, y también en el COSAL. Entonces hice un curso de foniatría durante un año y mi papá me acompañó siempre. Cuando entré en el COSAL, me dijo: “¿Estás segura de lo que querés hacer? Porque te vas a morir de hambre”. Y yo lo miré y le dije que no, que estaba segura. Me lo dijo por las dudas, para advertirme. Mi papá era así”, contó al definirlo.

Y agregó: “Me acuerdo que nos hacía regalos divinos para Reyes; un amigo suyo tenía una juguetería y con los años me enteré que se endeudaba. Los 6 de enero era una fiesta en casa, pero no en Navidad. Y un día, yo tendría 6 años, y se me ocurrió preguntar quién era Papá Noel y me respondió: ‘Un gordo feo que murió hace muchos años’. Habrá pensado que no podía bancar otra tanda de regalos. Era muy frontal, eso lo heredé de él”.

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