Con solo 4 ingredientes y sin necesidad de amasado ni levado, esta receta de pan de queso se ganó el corazón (y el tiempo) de quienes aman cocinar pero no quieren complicarse. Se puede hacer al horno o en sartén, y el resultado es un pancito crocante por fuera, suave por dentro y con sabor a hogar.
Es ideal para acompañar una picada, un desayuno salado o incluso como base para sándwiches caseros. Pero, sobre todo, para compartir con unos buenos mates de fin de semana. Además, no necesita harinas especiales ni técnicas complicadas.
Ingredientes
(para 8 pancitos chicos)
-200 g de queso rallado (puede ser muzzarella, reggianito, pategrás o una mezcla)
-1 huevo
-3 cucharadas de almidón de maíz (Maizena)
-1 cucharadita de polvo de hornear
Cómo se prepara
En un bowl, mezclá el queso rallado con el huevo. Agregá el almidón de maíz y el polvo de hornear. Integrá con cuchara o con las manos hasta que se forme una masa suave. Formá bolitas con las manos. Si la mezcla está muy pegajosa, espolvoreá con un poco más de almidón. Cociná en sartén antiadherente (sin aceite) a fuego medio, aplastando apenas, hasta que estén dorados de ambos lados. También podés llevarlos al horno a 180° por 15 minutos. Serví tibios. ¡Son una delicia!
Tip GENTE
Si tenés yogur natural o queso crema, podés reemplazar parte del queso rallado y lograr una textura aún más suave. También se le puede sumar orégano, ajo en polvo o semillas.
Mirá También


