Es sabido: “No hay nada mejor que la familia unida”. El refrán se repite hoy en las calles de Mónaco. Todos los Grimaldi lucieron sus mejores brillos para acompañar a Alberto II en su primer aniversario como soberano, que coincidió con la tradicional Soirée de Gala por la celebración del Día Nacional del principado. La gran ausente en los festejos del Opera de Montecarlo fue Charlene Lynette Wittstock, la novia del príncipe. “Estoy muy satisfecho con lo que hice este año”, declaró Alberto II a través de sus voceros.
Carolina de Hannover, de gala en el Opera
Pierre, Alexandra (¡chiflando!) y Ernst de Hannover
El soberano Alberto II, junto a Carolina y Estefanía