El caso que conmocionó a toda la provincia de Formosa tomó un giro dramático en las últimas horas. Gisela Agustina Mendoza, una mujer de 37 años que había sido reportada como desaparecida desde el domingo, fue encontrada sin vida en un descampado ubicado a escasos metros de la avenida Alicia Moreau de Justo, en cercanías del cementerio San Antonio.
El macabro hallazgo se produjo en la mañana del martes, alrededor de las 8:45, y confirmó los peores temores de su familia y de toda una comunidad movilizada.
La denuncia por su desaparición había sido radicada ese mismo domingo, luego de que perdieran contacto con ella tras haber sido vista por última vez junto a su expareja. A partir de allí, se inició una intensa búsqueda, encabezada por la Policía provincial y distintas divisiones especializadas, que incluyó rastrillajes, análisis de cámaras de seguridad y entrevistas a personas del entorno de la víctima.
En paralelo a esa búsqueda, la Justicia decidió avanzar con una medida clave: el juez de feria Enrique Javier Guillen ordenó la detención del ex de Mendoza, bajo la carátula de "privación ilegítima de la libertad y presunto femicidio".
El hombre había sido la última persona en ser vista con la víctima, en una moto, en inmediaciones a la zona del hallazgo. Las imágenes de cámaras de seguridad confirmaron que ambos llegaron juntos, pero luego él se retiró solo del lugar. Esa prueba irrefutable motivo el avance de la Justicia en su detención.
Fue esa pista, precisamente, la que dirigió los esfuerzos a la zona donde este martes finalmente se encontró el cuerpo. Canes de la Policía marcaron el área y, cerca de una casa abandonada, a unos 50 metros del asfalto, y a solo tres cuadras del cementerio, dieron con el cadáver de Mendoza. A simple vista, el cuerpo presentaba indicios de lesiones, aunque será la autopsia la que determine con precisión la causa de muerte.
Qué pasó en la escena del crimen
La escena fue preservada de inmediato y se desplegó un gran operativo con la presencia del juez Guillen, la fiscal Carolina Davini, y altos jefes policiales como el Comisario General Juan Moisés Villagra. También participaron efectivos de la Dirección de Policía Científica, Bomberos, Delitos Complejos y Búsqueda de Personas.
En una improvisada conferencia de prensa desde el lugar, las autoridades brindaron detalles del operativo y señalaron que el trabajo articulado entre las distintas fuerzas y el análisis de cámaras de vigilancia fueron claves para reconstruir los últimos pasos de Gisela.
El dolor de sus seres queridos
La comunidad está profundamente conmocionada. La familia de la víctima fue acompañada desde un primer momento por personal especializado de la Dirección General de Género y Violencia Intrafamiliar, así como por integrantes de Relaciones Comunitarias de la Policía. El caso reabre el debate sobre los vínculos violentos y la necesidad de reforzar los mecanismos de protección.
Mientras tanto, la investigación continúa. El único detenido por el crimen sigue bajo custodia, y todas las pruebas recabadas en el lugar —incluyendo las imágenes, testimonios y el informe forense— serán determinantes para esclarecer qué ocurrió realmente ese domingo y cómo terminó la vida de Gisela Agustina Mendoza.
Mirá También
“Levantaba chicos de la calle y los sometía": la aberrante historia del crimen que conmociona a Belgrano
Mirá También
