No fue un día más para el Oeste del Gran Buenos Aires. El lunes 21, siete formaciones cero kilómetro, de nueve coches cada una, se pusieron a rodar en las vías del Ferrocarril Sarmiento. En la estación Villa Luro estaban, para dar el puntapié inicial de esta nueva era en el ramal que va desde Once hasta Moreno, la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, y el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo. Fueron 1.280 millones de dólares los invertidos en comprarle a China todo lo necesario –incluidos vagones y locomotoras– para que el cambio tuviera lugar. El vínculo con el poderoso país oriental no se agota aquí. El titular del área cuenta que, integrando la comitiva del presidente Xi Jinping, viajaron "los presidentes de las empresas más importantes del sector. Lo crucial fue que la Presidenta logró el financiamiento para la puesta en valor del Belgrano Cargas por 2.470 millones de dólares. El 50 por ciento para material rodante: 100 locomotoras, 3.500 vagones y repuestos para 2.000 más. Y los otros 1.435 millones para la puesta en valor de 1.800 kilómetros de vía".
Randazzo, que se hizo cargo del área Transporte hace apenas dos años, se entusiasma: "El cambio fue más rápido de lo que muchos creían. En esta materia, la historia argentina va a recordar lo que hicieron los ingleses cuando construyeron el ferrocarril, la nacionalización en el gobierno de Perón y esta etapa. Lo que sucedió el lunes es muy importante. Cumplimos un compromiso asumido con la Presidenta: empezar la renovación del sistema ferroviario del Area Metropolitana y de cercanía del servicio de pasajeros. Si bien comenzamos con el San Martín, que hoy tiene 164 coches y 24 locomotoras cero kilómetro, el Sarmiento es un ramal emblemático. Operaba con once o doce formaciones de ocho coches, con una antigüedad de medio siglo, y ahora lo hace con 17 formaciones, de las cuales 7 son cero kilómetro y con una seguridad y comodidad del siglo XXI. El 10 de agosto estarán funcionando 14 nuevas. El 12 de septiembre serán 17, y las ocho que faltan para completar las 25 que compramos están llegando en estos días. La capacidad de transporte es de casi el doble: de 241.536 pasajeros, el lunes pasó a 399 mil y en agosto serán 460 mil. La frecuencia aumentó; ahora llegamos a diez minutos de espera".
–¿Qué diferencias hay entre los viejos trenes y los nuevos?
–Esto es la coronación del trabajo, porque ya habíamos cambiado las vías, puesto en marcha un sistema de información al pasajero, un señalamiento nuevo –que ahora va a interactuar con estos trenes nuevos– y la posibilidad de que si el motorman comete alguna falla, se detenga automáticamente. Tiene sistema anti-acaballamiento, que impide a un vagón montarse sobre otro, frenos ABS, suspensión neumática para que el viaje sea más placentero, sistema de cierre de puertas que hace que el tren no arranque si no están cerradas, dos cámaras en la cabina del motorman –la puerta de éste es trasparente, para que el usuario vea su conducta–, aire acondicionado... Lo positivo es que el reconocimiento de los pasajeros es alto; destacan la comodidad y la seguridad. Y la sorpresa de ver cómo cambió el ferrocarril, que venía en decadencia. La idea de la Presidenta es "ramal que arranca, no para", en contraposición al "ramal que para, ramal que cierra" de otro tiempo.
–Además de los trenes, también se inauguró Villa Luro como "estación inteligente". ¿De qué se trata?
–La diseñamos para que el pasajero que tenga alguna discapacidad motriz, pueda utilizarla sin problemas. Tiene baños para cada caso, sistema de seguridad para quien expende pasajes –como la sucursal de un banco–, señalética nueva. Ahora empezamos Caballito, Ciudadela, Castelar, Ramos Mejía, Haedo y otras.
–Esto necesita también un compromiso del pasajero. Sin embargo, a las pocas horas habían ensuciado una locomotora con grafitis...
–Fue una noticia lamentable. Cuando estaba ingresando una formación en hora pico, el motorman observó por las cámaras del tren que dos pibes grafiteaban. Se pudo avisar a la policía. Previendo esto, la pintura de los coches tiene una laca antigrafiti especial, que en cuatro horas se limpia. Además, capacitamos brigadas de seguridad, para estar en las formaciones, interactuando con las fuerzas policiales. De hecho, ya se detuvo a personas por distintos delitos. Cumplen la función de hacer respetar los derechos de los pasajeros, la prohibición de alcohol y cigarrillo, que cedan el asiento a embarazadas... La idea es dar seguridad al pasajero. Pero, bueno... Siempre hay imbéciles que estropean el patrimonio de todos. Producir un cambio cultural es otro desafío. La idea es tener, en todo el país, un servicio público de transportes de excelencia en el corto plazo, y lo vamos a lograr.
–¿Qué sucederá más allá de la zona metropolitana?
–Pusimos nuevos trenes de cercanía, por ejemplo entre La Plata y Constitución, cuya obra de electrificación ya se empieza a ejecutar. El año que viene terminaremos Mar del Plata-Constitución. Se está trabajando en la curva de Chascomús, que permitirá evitar 17 pasos a nivel. A Rosario tenemos en ejecución los 11 tramos, y ya llegaron 220 coches y 24 locomotoras para estos dos servicios. Y hace muy pocas horas, el sábado 26, rehabilitamos el servicio Buenos Aires-Realicó-Pico, con un recorrido de 500 kilómetros; es decir que el tren vuelve a La Pampa. Por decisión de la Presidenta, donde hubo un tren de pasajeros, volverá un tren de pasajeros. Para un país tan extenso es indispensable poner en marcha el sistema a nivel nacional.
–Dicen que, a caballo del tren, usted piensa lanzar su candidatura a presidente en un corto tiempo.
–No, no. Ningún lanzamiento de candidatura. Pretendo sí, ser candidato en las PASO del próximo año por el Frente para la Victoria, pero falta tiempo. El mayor capital político que puedo exhibir es que cuando tuve responsabilidad sobre un tema –el DNI, el pasaporte, los trenes–, con el apoyo de la Presidenta lo pude resolver.
Randazzo y la Presidenta dentro de un flamante vagón. “Terminamos el San Martín, el Sarmiento, y ahora vamos por los tres ramales del Mitre”.
En la cabina del motorman: “Tiene dos cámaras y la puerta es trasparente, para que el usuario vea su conducta”.
Las nuevas formaciones, además, tienen “una laca antigrafiti especial, con la que en cuatro horas se puede borrar lo que escriban”. El primer día ya hubo un hecho de vandalismo, que fue detectado.