El edificio Kavanagh es uno de los más icónicos de la ciudad de Buenos Aires. Construído en 1934 y declarado Monumento Histórico Nacional en 1999, esconde en su interior parte de la historia porteña. Dentro de sus ambientes vivieron figuras de las más resonantes del mundo empresarial y político, al punto que con el tiempo recibió como apodo “el edificio del poder”. Sin embargo hoy se abrió al público en general de la mano de una interesante propuesta gastronómica.
Por primera vez desde su inauguración, aloja una cafetería. Se trata de Cora Café, que abrió sus puertas a fines de marzo luego de un intenso proceso por medio del cual su consorcio permitió que se instale este tipo de comercio, ya que no estaba permitido por su reglamento con anterioridad. El nombre es en honor a Corina Kavanagh, la ideóloga del proyecto edilicio.
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“Elegimos ese lugar por el desafío y la posibilidad de abrir en una locación única, con la intención de generar un proyecto de excelencia y bello, de revitalizar y poner en valor la cuadra y dialogar con el patrimonio vivo de la arquitectura argentina, así como con la tradición de cafetería y pastelería porteña y de nuestro país”, afirma a Revista GENTE Facundo Olabarrieta, dueño y gerente de Cora.


“Por suerte, tuvimos muy buena recepción de los vecinos del edificio y del barrio, a la vez que por parte de visitantes de zonas más lejanas de la ciudad”, agrega el joven de 33 años.
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Y celebra: “Los comentarios positivos para el café, la pastelería, la arquitectura y la música o la atención y el servicio nos llenan de orgullo y agradecimiento y nos dan energías para seguir mejorando y poniendo lo mejor de nosotros con la idea de hacerle honor a este edificio único que es el Kavanagh”.

Cómo es la propuesta gastronómica
“La carta está pensada para hacer honor a la pastelería argentina y a la tradición del café porteño y argentino en general. No hay patisserie o cookies o rolls de canela. Hay medialunas, galletas y palmeritas”, cuenta Olabarrieta.

Y añade: “También hay tablas de quesos y vermú. Elegimos con mucho cuidado a todos nuestros colaboradores y proveedores, haciendo énfasis en la calidad y la regionalidad de la producción”.
Algunos precios relevantes de la carta

- Medialuna rellena con jamón cocido y queso cuartirolo y sardo: $5,800.
- Medialuna: $2,800.
- Chipá: $3,800.
- Fosforito de jamón y queso: $6,200.
- Café espresso: $3,800.
- Cortado intenso: $4,400.
- Capuchino: $4,700.
- Jugo de naranja exprimido: $6,000.
- Tostón de palta, huevo, pickles y brotes: $11,800.
- Tabla de quesos: $12,500.
- Tabla de charcutería con baguette: $12,500.
- Ensalada del día: $10,500.
- Tarta del día con ensalada: $15,000.
- Baguette de jamón crudo con queso brie: $12,000.
- Prensado de jamón cocido, queso cuartirolo y sardo: $10,500:
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La historia del Kavanagh y su falso mito

Mariela Blanco, autora de La Historia es Noticia, habló con Revista GENTE sobre el falso mito de por qué fue levantado cel edificio "Una extendida leyenda señala que se construyó como una venganza arquitectónica que intentó tapar la visual entre la mansión Anchorena (Palacio San Martín) y la Basílica del Santísimo Sacramento, que se había destinado como sepulcro de esa familia aristocrática... Parece ser que Mercedes Castellano de Anchorena se habría interpuesto en una relación amorosa entre su hijo Aarón y Cora”.
“Pero dicha historia no puede escalar mas allá de la categoría de mito urbano ya que Mercedes muere en 1920 y el edificio Kavanagh se inaugura en 1936, así que probablemente sólo se trató de mitología urbana alimentada por la fantasía popular y reforzada por el marketing turístico. Eso sí, gracias al mito, el Kavanagh es toda una celebridad dentro del gran vodevil arquitectónico de la Plaza San Martín", reconoce.

"En su época fue el edificio de concreto más alto de Sudamérica y el primero en la Argentina en contar con aire acondicionado central. Su construcción escalonada dio lugar a terrazas jardín, corredores quebrados, habitaciones que se abren a patios interiores, como si el edificio buscara alivio entre sus propios pliegues", dice.

Además, destaca que "posee una forma similar a la proa de un barco, y por la orientación del edificio da lugar a la similitud de la misma apuntando hacia el Río de la Plata. En el ala izquierda hay algo que desentona: dos columnas y un balcón neoclásico que no tiene nada que ver con el resto. Es que esa era, precisamente, la residencia de Cora Kavanagh".
La especialista en patrimonio porteño anticipa un dato que formará parte de Tan Buenos Aires, el libro que tiene previsto publicar a fin de año: “Los planos originales del sótano del Kavanagh son un documento vivo de la ambición técnica y estética de la época, ya que muestran detalles de instalaciones hidráulicas y sanitarias modernas que evidencian un confort adelantado a su tiempo, como el agua caliente central, el sistema de bombeo y la ventilación forzada. La presencia de un tanque de 50 mil litros confirma la magnitud de la autonomía hidráulica con que contaba el edificio”.
Un emblema porteño en venta: el penthouse del Kavanagh busca nuevo dueño

El piso 14 del Edificio Kavanagh, el icónico rascacielos racionalista de Buenos Aires, está en venta por primera vez en más de quince años. Se trata del penthouse de 750 metros cuadrados que perteneció a Corina Kavanagh, la mujer que desafió a la aristocracia porteña y dio vida a este ícono de cemento y rebeldía.
La comercialización está a cargo de Alto Grande Desarrollos-M&M Propiedades, bajo la gestión de Pablo Barrera, Team Leader y Gerente Comercial de la firma.


La unidad -modernizada con materiales de lujo, pero fiel a su esencia original-, atrae a compradores locales e internacionales amantes del diseño, la historia y la exclusividad que sólo una ubicación como Plaza San Martín puede ofrecer.
Ubicado en el barrio de Retiro y construido en 1936, el Kavanagh fue el edificio más alto de Sudamérica hasta 1947, cuando lo superó el Altino Arantes de San Pablo (Brasil). Su diseño art déco, de líneas puras y proporciones monumentales, lo convirtió en un emblema de la modernidad porteña. Corina Kavanagh, mujer soltera y millonaria, encargó su construcción a los arquitectos Sánchez, Lagos y de la Torre. El penthouse sale a la venta en 2,6 millones de dólares, con expensas de 2,1 millones de pesos.

En declaraciones a Revista GENTE, Barrera suma: “El Edificio Kavanagh es una de las obras más emblemáticas de la arquitectura moderna en Buenos Aires. Fue el primer rascacielos de la ciudad y marco un hito al ser el más alto de América Latina en su momento. Su estilo art déco, caracterizado por líneas rectas, terrazas ajardinadas y una estructura de hormigón armado, le dio una personalidad única que lo convirtió en un ícono de la ciudad”.
Fotos: gentileza Cora Café, La Historia es Noticia y redes sociales.

