Hace semanas que el nombre de Aníbal Lotocki (53) se encuentra ineludiblemente presente en los medios de comunicación y en las calles de nuestro país. Tras las dolores muertes de Mariano Caprarola (1974-2023) y Silvina Luna (1980-2023), muchas otras personas que fueron atendidas por él salieron a su cruce y reclaman justicia. Del mismo modo, existen víctimas que prefirieron poner toda su energía en su salud y no iniciaron acciones legales por todo el esfuerzo que conlleva. En este sentido, Virginia Gallardo explicó cómo fue su traumática experiencia con el médico y cómo está actualmente su salud.
Los motivos de Virginia Gallardo
Virginia recordó sus frustrantes experiencias cuando comenzó a buscar explicaciones a sus múltiples dolores físicos: “Yo buscaba médicos que veían mis estudios y me decían ‘no, gracias, yo a vos no te atiendo’. A mí nadie me quería atender, y tampoco lo podía denunciar (a Lotocki) porque la Justicia te decía ‘No nena, lo tuyo es imposible de comprobar’”.
“Ricardo, mientras tanto, me decía al aire: ‘Denunciá nena’. Pero yo no podía decirlo porque tenés que comprobarlo y yo no tenía herramientas. Si yo salía a decir algo, Lotocki me demandaba a mí. ¡Era una locura!”, reveló con total sinceridad en el piso de Socios del espectáculo.
Ante las críticas que recibió y recibe por no haber denunciado al cirujano, explicó: “Ahora todos me dicen que yo no lo denuncié, pero era desgastante. Era no sólo someterme a estudios... ¡no saben a la cirugía que tenés que someterte para sacar el producto! Es realmente… ¿cómo decirlo?, te destruye anímicamente, físicamente, psicológicamente. Es demasiado. Son muchos años”.
El fuerte testimonio de Virginia Gallardo, otra víctima del cirujano
Hablando de las cirugías, y de si se arrepentía de haber tomado esa decisión corporal, ella dijo: “No fue una mala decisión querer hacerme un tratamiento de cirugía estética. Ese no es el error. El error fue caer en las manos de este tipo. En buenas manos hasta a veces te cambia para bien”.
Retomando el relató de su agotadora experiencia al intentar denunciar a Lotocki, la panelista recordó: “Cuando yo fui a la Justicia, fue la misma Justicia la que me dijo: ‘Nena, perdés el tiempo. ¿Cómo vas a demostrar que tenés dolores?’, cuando solo tendría que bastar que tenga el producto en el cuerpo, decir dónde me operé y en qué condiciones que me operé. Eso tendría que ser suficiente. Por eso me indigna”.
“Para que se entienda, yo tengo cemento en un músculo. Me pusieron cemento y, para sacarlo, me lo tienen que rebanar. Es una cirugía terrible. Hay que exponerse a algo espantoso”, cerró contundente sobre su estado de salud.
