No sólo es la esposa de Lionel Messi, el gran 10 argentino y campeón del mundo, a quien acompaña con mucho orgullo en primera fila en cada logro: Antonela Roccuzzo se convirtió con el tiempo en una importante referente de la moda.
Si bien tiene una vida muy bajo perfil, su influencia en redes sociales resulta impresionante. Hoy, son muchas las marcas que la contratan como embajadora, así como los diseñadores que buscan vestirla en los importantes eventos a los que es invitada y donde todos tienen la mirada puesta en sus looks.
Nació en la ciudad de Rosario el 26 de febrero de 1988, y aunque primero soñó con ser odontóloga o comunicadora social -ambas carreras universitarias quedaron a medias-, su vida dio un giro inesperado. Ahora, es empresaria y modelo, tiene su propia línea de ropa, un imperio en las redes sociales y disfruta de una familia hermosa de tres hijos (Mateo, Ciro y Thiago), y es la reina de una casa donde el fútbol es casi religión.
Aunque su vida cambió definitivamente, se instaló en diferentes partes del mundo y su estilo fue mutando a lo largo de los años, hay algo que no ha cambiado en lo absoluto: la simpleza con la que se muestra y que la hace brillar a su paso.
Si hay algo que deja claro Antonela Roccuzzo y que parece ser su sello, es que a veces menos es más, y, que no hace falta la extravancia para lucir elegante y sofisticada. La rosarina es muy discreta y aunque está expuesta constantemente a las cámaras y paparazzis, no espera robarse el protagonismo en sus apariciones públicas.
El estilo de Antonela Rocuzzo a lo largo de los años
En las primeras imágenes que circularon en internet de Antonela con Lionel Messi, la rosarina lucía el cabello morocho, con un flequillo muy de la época de los 2000: abundante y peinado hacia el costado.
Sin una gota de maquillaje en su rostro, pero eso sí, con las cejas muy bien perfiladas, las pestañas con volumen, y su característica sonrisa que conquistó al capitán de la Selección Argentina.
En cuanto a los accesorios, usaba diminutos aros y no más que eso para complementar sus sencillos looks con los que acompañaba a su pareja, en su mayoría optaba por piezas básicas de colores neutros como el negro, beige o blanco.
Del 2013 al 2015: un tiempo para explorar estilos
El primer cambio de look notorio de Antonela, tuvo que ver con su pelo. La rosarina decidió aclararse el tono a un castaño claro, además, comenzó a lucir la melena mucho más larga, con degradado al frente, en un corte estilo mariposa., que solía llevar con ondas.
Para estos primeros años, no parecía tener un estilo definido. Podía aparecer un día con tonos neutros, otros con estampado de flores, y en alguna otra ocasión con brillos y escotes. Pero ya sin duda había un gran salto en su apariencia.
De ser esa chica muy discreta, comenzaban a aparecer los looks con maquillajes más fuertes, de delineados oscuros, pestañas largas y cejas marcadas.
Del 2016 al 2019: estampas y brillos
Años después de comenzar su historia de amor, exactamente el 30 de junio de 2017 la pareja se casó en una lujosa boda en Rosario que dio mucho de qué hablar y donde asistieron figuras importantes del fútbol como Luis Suárez y Gerard Piqué, quien estuve acompañado por supuesto con su entonces esposa, Shakira.
El look de novia de Antonela dejó sin aliento a Messi y a todos los invitados. Para esta importante fecha que marcaría un antes y un después en su vida, eligió un vestido de delicados encajes y escote al frente. Además, agregó más volumen a su pelo con un peinado de semirecogido y ondas.
Cada vez, los eventos a los que acompañaba a su esposo se hicieron más frecuentes y por lo tanto, su notoriedad ante las cámaras. La argentina se declaró una fanática de los brillos o al menos, así lo hizo ver con sus estilismos.
De escotes pronunciados en corte V, a usar el dorado y el plateado, siempre combinado con negro y en una que otra ocasión se animó a usar colores más vivos como el celeste, estas fueron sus apuestas entre los años 2016-2019. Con un color de cabello que fue variando en tonos más claros a más oscuros de castaño y un maquillaje que también fue pasando de lo más simple, a los labios colorados.
Los estampados también fueron una opción en el guardaropas de Antonela, así como los tacos de plataformas gruesas. En sus looks más casuales para el día a día, complementaba muy bien un look básico con alguna chaqueta o telas con detalles llamativos y coloridos.
Del 2020 al 2023: el total black y el monocromático siempre es ¡un sí!
Con el pasar de los años, Roccuzzo fue mutando su estilo de un extremo a otro. Ya los brillos no eran su elección segura y tampoco los estampados o los escotes. Ahora, adoptaría un estilo mucho más vanguardista, sin dejar de lado la simpleza que la caracteriza.
Elegantes vestidos de satén, looks monocromáticos de pies a cabeza, maquillajes luminosos y peinados variados con el pelo en un tono más oscuro, así se presentó la rosarina, en estos últimos años con una postura mucho más sofisticada.
Sin dejar de mencionar que, presentó el total black en todas sus versiones y destacó en las diferentes alfombras rojas y eventos a los que asistió. La empresaria es la prueba de que una pieza en negro es el clásico que nunca pasará de moda, y combinado con los accesorios correctos puede ser un outfit de impacto.
Este estilo monocromático lo lució en: traje de pantalón y blazer, vestido corto y botas, vestido de gala, y set de pantalón y top más canchero con lentes oscuros, ideal para sus apariciones en diferentes partes del mundo.
Actualidad: Básicos y accesorios, la combinación perfecta
Este último año, la llamada por los fanáticos como 'primera dama' del fútbol, ha dado cátedra de cómo pasar de un look simple a uno que se robe la mirada de todos. La fórmula que utiliza es combinar piezas básicas con colores lisos (sin estampas) y agregarle accesorios que visualmente sean atractivos.
Esto, aplica tanto a sus outfis deportivos y casuales, como a los que usa para la noche o en eventos de gala. Los bolsos de mano son la gran debilidad de Antonela, porque si bien no es de usar accesorios llamativos, este es su infaltable.
Además, pasó de solo elegir colores neutros como el negro, blanco o beige, a arriesgarse con tonos más coloridos como el rosa, fucsia, violeta, verde o rojo, que están muy en tendencia.
En cuanto al calzado no tiene miedo en pasar por todos los estilos y mostrar su versión en tenis o zapatillas deportivas, botas largas, o tacos altos, así como stilettos más delicados.
