Una de las grandes búsquedas y consultas en internet es sobre el tratamiento para congelar óvulos o también llamado criopreservación de ovocitos maduros, que es un método para conservar el potencial reproductivo de las mujeres para el futuro.
En diálogo con Gente la Doctora, Mercedes Fiuza, médica tocoginecóloga de la Ciudad de Buenos Aires; especializada en Ginecología, Obstetricia y Cirugía Endoscópica Ginecológica, respondió algunas de las dudas más frecuentes sobre este procedimiento que se han realizado distintas famosas argentinas como Esmeralda Mitre, Agustina Kämpfer y Alejandra Maglietti.
¿A partir de que edad puede realizarse?
El congelamiento de óvulos puede realizarse desde los 20 años en adelante. Siempre depende cuál sea tu estado de reserva ovárica y la calidad de los óvulos que se vayan a congelar. Esto suele disminuir con el paso del tiempo por lo que encontramos menos factible este tipo de procedimientos en mujeres alrededor de los 40 años.
¿Cómo se extraen los ovocitos? ¿Es peligroso el procedimiento?
El procedimiento se realiza bajo anestesia y con control ecográfico continuo. Los ovocitos se extraen por punción directa desde el fondo del saco vaginal, en posición ginecológica.
¿Cuál es el procedimiento que se realiza una vez que se decide ser madre?
Los óvulos mejor preparados y con mayor calidad se unen con el esperma de la pareja o de un donante, cualquiera sea el caso, y luego se implantan en el útero de la paciente que desea gestar.
Se indican una serie de tratamientos hormonales (inyectables, orales y vaginales) para inducir la progresión de los ovocitos en los ovarios de la paciente . Una vez alcanzado el tamaño deseado, que corresponde a una fase biológica de la división celular que se necesita para luego poder realizar los tratamientos de fertilidad, se realiza la punción en sí misma.
¿Cuántos años pueden permanecer congelados los óvulos?
Muchos. Esto depende de cada centro y las diferentes posibilidades que te dan para, incluso si se desea no utilizarlos para una misma, poder donarlos. Para otra persona o para la ciencia y su estudio.
