La reina Máxima de Holanda rindió este martes un emotivo homenaje a su joven hermana, que sufría depresión y fue hallada muerta hace diez días en su vivienda de Buenos Aires, probablemente debido a un suicidio.
En una inusual y personal intervención pública, la reina agradeció a quienes le enviaron cartas y mensaje de apoyo tras la muerte de Inés Zorreguieta, de 33 años de edad.
"Mi pequeña, querida y talentosa hermana Inés estaba enferma. No podía hallar la felicidad, no conseguía sentirse mejor" dijo Máxima al visitar un centro médico en Groningen.
"Nuestro único alivio es que ella está, al fin, en paz".
La reina, nacida en Argentina, aludió a las "innumerables cartas" que recibió y agradeció "el respeto que la gente ha mostrado a mi familia en estos momentos tan duros".
Máxima de Holanda asistió en Buenos Aires, junto con su familia, al funeral de su hermana en el cementerio Parque Memorial de Pilar. La monarca estuvo acompañada por su marido, el rey Guillermo Alejandro, y las tres princesas.
La reina Máxima mantenía una estrecha relación con su hermana, trece años más joven que ella. La monarca se sentía responsable de Inés y prodigaba sus cuidados, según la prensa holandesa. Inés fue dama de honor de Máxima en su boda y madrina de su hija Ariadna, la menor de las tres hijas de los reyes.
La Haya (AFP)