En su rol de comediante con determinado humor incorrecto inclinado a lo narrativo, pero también como integrante de una comunidad disidente, Costa encuentra en el lenguaje inclusivo un terreno interesante para explorar desde el escenario. En el monólogo que abre Costa Presidenta, su actual espectáculo en el Teatro Premier de Avenida Corrientes, la protagonista cuenta que en su gobierno todos los sustantivos terminan con A. “Viene de cuando yo empecé en el under y todas las transformistas en vez de decir ‘tesoro’, decían ‘tesora’, ‘mi ciela’ y así”, recuerda en la entrevista con Celeste Montanari en el marco de +GENTE.
“Entonces hablo con Dios y me dice que ‘Presidente’ es inclusivo porque termina con E, lo corrijo y le digo: ‘PresidentA, yo no he luchado tanto en mi vida como para que me llamen con una E’. Es un chiste, por supuesto”, dice Costa, que también habló sobre el periodo en el que vivió en la calle, en Buenos Aires, cuando comenzó a trabajar en los teatros de calle Corrientes.
Vestite como quieras, vestite para vos
En línea con una filosofía que invita a derribar los mitos construidos alrededor de las construcciones sociales, el género y la indumentaria, Skip acompaña la segunda temporada de +Gente matcheando con la narrativa “vestite como quieras, vestite para vos.”, de la que hace bandera la marca.
GENTE: ¿Cuál es tu opinión sobre lenguaje inclusivo?
Costa: A mí me parece que hay realidades que habita el lenguaje inclusivo. El lenguaje es algo dinámico en la historia de la humanidad. Me parece que hay lugares donde es aplicable y hay lugares donde no. Hay lugares donde vos te das cuenta que está impuesto. Hay gente muy ignorante que dice que el lenguaje inclusivo no debería existir, pero sí debe existir.
G: Puede usarse o no…
C: Descubrí que hay una cosa que se llama argot, que es un lenguaje propio de una comunidad y que usarlo te constituye como parte de esa comunidad. En la época del proceso (N de la R.: en relación a la última dictadura militar acá a las chicas trans, que eran las travestis, cuando iban presas le empezaron a crear un idioma que sólo ellas conocían. Entonces ellas hablaban en los calabozos entre ellas y la policía no entendía. Ese lenguaje, que se llama carrilche, pasa después a los shows del transformismo y a los camarines.
G: Empezó como un mecanismo de defensa…
C: Claro, por eso que no me vengan a mí los ministros de Educación y etcétera a criticar el lenguaje inclusivo. El lenguaje es algo dinámico, se crea, nos hace pertenecer y a nosotras este lenguaje nos ha salvado. El tema fue cuando los policías empezaron a entender el lenguaje de las travestis, entonces era que ya estaban involucrados.
Transparente, nunca invisible
La producción de las cápsulas de la segunda temporada de +GENTE se llevaron a cabo con el apoyo de Absolut, una marca que desde hace más de 40 años trabaja sobre la diversidad con la intención de construir un mundo libre de etiquetas
G: Con este cuerpo nuevo fue redescubrirte. ¿Cómo expresás tu ser con la ropa?
C: La ropa es un lenguaje. Antes me ponía lo que había. De hombre, de mujer, de pájaro. Lo que entraba me ponía. Yo tenía 120 kilos más de lo que mi cuerpo está preparado para soportar. Entonces, después que yo me operé estuve mal, porque se me hizo una fístula, lo cual era lo más esperable para una persona que destruyó su organismo de la manera que yo lo hice. Entonces ahora la frivolidad bien entendida de poder mirar y decir “esto quiero”. Ahora que viene una entrega de premios, llamé a mis chicos de Casa de Muñecas y empezamos a pensar el look. Y la comodidad de haber encontrado gente amorosa, una marca que se llama Dicol, que me vestían cuando yo tenía 200 kilos cuando empecé en la tele y nadie me quería vestir, no por gorda sino por travesti. Y después mucha gente de los locales de calle Avellaneda, que nos adoran a los del Club del Moro porque nos escuchan cuando están abriendo los locales. Más de una vez he ido y conseguís. Es lindo elegir algo con lo que te sientas cómoda. Ahora puedo elegir la ropa, la comida, puedo elegir un hombre. Antes me acostaba con el que quería acostarse conmigo, no con el que yo quería. Si el hombre quería yo accedía. Eso es lo que cambió. Ahora elijo.
¿Qué falta en Argentina para que una persona trans llegue a la presidencia?
¡Mirá la entrevista completa de Costa en +GENTE!
Redactó para GENTE: Gabriel Orqueda.
