Gastón Edul cuenta su historia: de la dura lucha de su madre para traerlo al mundo a la fuerte conexión que tiene con su hermano mellizo – GENTE Online
 

Gastón Edul cuenta su historia: de la dura lucha de su madre para traerlo al mundo a la fuerte conexión que tiene con su hermano mellizo

El periodista deportivo se confiesa con GENTE y habla como nunca de su vida personal: los detalles de un domingo en familia, cómo maneja la exposición y por qué sólo le presentó una novia a su mamá.
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Con un pronóstico de lluvia que afortunadamente se disipa, Gastón Edul llega al Estadio Diego Armando Maradona, la sede de Argentinos Juniors ubicada en el barrio La Paternal de la ciudad de Buenos Aires, para tener una charla profunda con GENTE en una tarde nublada, con el mate en mano y la cancha de fondo.

No muestra sorpresa por lo imponente de este lugar, porque ya conoce cada rincón y se siente como en casa. En medio de la producción, hace un recorrido que va desde las gradas hasta los vestuarios de los jugadores, y termina en el icónico museo "El templo del fútbol, la cuna de Dios".

Gastón Edul es una de las jóvenes promesas del periodismo deportivo.

Edul sabe todo sobre la historia de este estadio y recuerda con emoción que fue aquí donde le dieron algunas de sus primeras oportunidades como periodista deportivo, pero también donde Maradona debutó en 1976 cuando tenía apenas 15 años y donde Lionel Messi se estrenó en la Selección argentina en 2004 con la camiseta 17. "¿Habían venido antes?", nos pregunta. Y sugiere: "Aprovechen de sacarse una foto para el recuerdo. Este lugar es histórico".

Entre flashes, comenta sobre fútbol con dos integrantes del club que lo acompañan a lo largo de la jornada. También recibe con amabilidad a quienes le piden una foto. El joven de 29 años ha logrado salir del formalismo que se acostumbra ver en su profesión.

Mientras se sienta en el banco de suplentes que dice "Maradona 10", cuenta alguna de sus anécdotas profesionales.

En esta ocasión no trae traje ni corbata y tampoco dará la formación de algún partido. Se anima a posar con looks más descontracturados y pasa por un instante al otro lado de la vereda: a ser quien cuente su propia historia. También responde algunas preguntas no tan cómodas, como por ejemplo, qué pasó realmente entre él y Nati Jota.

Con una carrera en ascenso, ha logrado consolidarse como una de las fuertes figuras del periodismo deportivo. En la actualidad, está al aire por TyC Sports, utiliza sus redes sociales para dar las primicias más esperadas del fútbol y es una de las revelaciones del streaming. Este 2025 lo arrancó anunciando nuevo programa en OLGA, espacio que compatirá con El Pollo Álvarez, Pedro Alfonso, Coker y Ariel Senosiain.

En retrospectiva, su mirada está llena de orgullo, y también de nostalgia. Aquí, en el ambiente en el que se siente más cómodo, recuerda cómo aprovechaba el tiempo libre de su colegio para ir a su casa en Boedo a mirar los partidos, pero se centraba en cómo los narraban. O prestaba especial atención en lo que hacía su hermano Esteban, quien fue su gran inspiración.

"Los momentos donde recién arrancaba, son los que recuerdo con más cariño", dice.

La infancia de Gastón y cómo manifestó convertirse en periodista deportivo

-¿Qué sentís cuando entrás a una cancha de fútbol?

-Lo que siento cuando entro a un campo de juego es que es mi lugar... A mí por mi carrera me ha tocado ir a otros lugares, trascender diferentes medios, plataformas. Sin embargo, no hay sensación igual para un periodista deportivo que estar acá. Nuestro lugar es éste. Después uno con el correr del tiempo labura en estudios de streaming, de televisión pero a mí lo que me gusta es esto, me trae muchos recuerdos.

-¿Cómo cuáles?

-Yo pasé por varios clubes, entre ellos uno al que le guardo mucho cariño es éste, Argentinos Juniors, que si bien yo quizás no era tan conocido y recién estaba haciendo mis primeros pasos en este mundo, me dieron oportunidades increíble... Hace poco lo hablaba con mis amigos, y te juro que esos momentos donde recién arrancaba los recuerdo con más cariño que nada, así que me encanta estar acá, es mi lugar.

Edul posa para GENTE en la platea de la cancha de Argentinos Juniors.

-¿Siempre soñaste con ser periodista deportivo?

-¡Siempre! Desde que era chico... De hecho mi familia y amigos me cargan porque yo tenía 12 años, estaba en secundaria con los mismos amigos de toda la vida, con los que estoy desde los 4 años en sala de infantes, primaria y secundaria en Parque Patricios, y ya en secundaria decía que quería ser periodista deportivo... Es más: ya decía que era periodista deportivo.

-¿Cómo lo manifestabas?

-Relataba partidos de Play, le firmaba autógrafos a mis amigos... Esa anécdota la he contado y es increíble que con el paso del tiempo se haya vuelto realidad.

-Y en esos autógrafos ponías que trabajabas en TyC Sports, el medio para el que trabajás hoy...

-Sí (risas), yo firmaba G. Edul y ponía TyC Sports, porque era el canal que yo veía de chico. Iba a un colegio doble escolaridad, que era la mañana en castellano y en la tarde en inglés, entonces tenía un hueco de una hora y media que yo aprovechaba para ir a comer a la casa de mi vieja y recuerdo que almorzaba mirando TyC Sports. Yo decía: "Quiero estar ahí".

El joven manifestó desde chico que quería ser periodista deportivo y firmaba "autógrafos" donde ponía que era figura de TyC Sport, señal para la que labura en la actualidad.

-¿Algunos periodistas deportivos antes de llegar a ese rol fueron o intentaron ser futbolistas ¿es tu caso?

-No... Yo soy tan malo jugando al fútbol que ni lo tomé como una opción, te soy sincero (risas). Me encanta jugar a la pelota, juego dos veces por semana, pero no tengo virtudes, ni para ilusionarme. Tampoco tuve de chico esa cultura de club de barrio, que tus viejos te lleven, que te lleven de visitante, no lo tuve... Por ejemplo, en el caso de mi hermano Esteban le gusta más el fútbol que el periodismo, mira diez partidos por fin de semana, y a mí me gusta más el periodismo que el fútbol y encontré en el fútbol un lugar donde me sentía cómodo para comunicar.

-¿Si no hubieses sido periodista deportivo, a qué te dedicarías hoy?

-Estudié periodismo deportivo porque lo veía a mi hermano, pero en un momento dudé y lo hablé con él, tenía la idea de irme por el periodismo general... Algo que no todos saben, es que me gustan mucho los policiales, me gustan mucho las coberturas. Leí casi todo de Rodolfo Walsh, cuando él era un periodista policiales. Siempre me gustó, me apasiona la comunicación. Me apasiona las películas que incluyen diarios, periodistas o esos debates de cómo dar una información o cómo se recaba, cómo se llega a las fuentes...

La admiración por su hermano Esteban y cómo separan su vínculo familiar del profesional

Esteban es el mayor de los Edul. Muy conocido en el ambiente del periodismo deportivo, con una familia armada y un hijo, Toto. Se lleva 12 años de diferencia con sus hermanos por lo que tenía un camino ya marcado cuando ellos eran chicos y sin saberlo, estaban muy atentos a todo lo que hacía. "Siempre quise ser como él... Estuve y estoy influenciado por mi hermano. Me enamoré de la profesión viéndolo a él trabajar. No es que yo había visto otro periodista, yo lo veía a él", confiesa Gastón.

-¿Qué era eso que veías de él?

-Recuerdo que llegaba a casa y en ese momento él vivía con nosotros cuando era mucho más chico, con mis papás y yo les decía: "Quiero hacer lo que hace Esteban... Quiero contar cómo forma un equipo. Quiero contar los lesionados que tiene. Quiero hacer un análisis post partido". Así que de alguna manera yo quise y quiero ser él.

Gastón confiesa que siempre admiró a su hermano Esteban y fue su principal referente.

-¿Y cómo manejan esa dualidad de trabajar juntos y también ser hermanos?

-Hay veces que nos olvidamos que somos hermanos (risas) porque al final en la gimnasia del laburo él está al aire la misma hora que yo, y capaz que yo me entero que dijo algo por redes sociales y yo quiero decirlo para mi programa. En esos casos le escribo o él me escribe o me llama para una nota que tiene que hacer, y tenemos la dinámica que tengo con cualquier otro periodista, otro colega. Pero después llega un momento donde somos hermanos.

-¿Cuál es ese momento?

-Cuando nos damos cuenta de que no hay competencia, donde no nos importa competir... Si yo sé que él se está equivocando en algo, se lo digo al instante por más que yo no lo haya dicho al aire. Todo el tiempo le pido consejos, en cada paso que di y que doy. Y ahora, lo que es la vida, que a veces me pide él a mí, porque yo manejo otras áreas que él quizás no tanto, como el stream o las redes, y me termina preguntando y eso me genera algo lindo.

Gastón y Esteban en el Mundial de Qatar.

-¿Recordás algún consejo puntual que te haya dado?

-En mi primera transmisión de un partido de fútbol fue para Radio Mitre, yo tenía dieciséis años y tenía que cubrir un partido de San Lorenzo - Belgrano en cancha de San Lorenzo, y no sabía ni el tono en el que tenía que hablar, ni la fluidez... y me acuerdo que él vino a casa y me dijo: "Mirá, hacé la del jugador de fútbol cuando está por debutar. Cortá el pie, recuperás, tocás, no te compliques. Comentarios cortos, datos concretos, después ya vas a tener tiempo para explayarte mejor y dar vueltas"... y la verdad es que eso lo tomé.

Edul comenzó pidiéndole consejos a su hermano, pero por las vueltas de la vida su hermano terminó pidiéndoselos a él.

El duro proceso por el que tuvo que pasar su mamá para tener mellizos

En su reciente paso por Bake Off contó que su madre tuvo que someterse a un estricto tratamiento de fertilidad para poder tenerlo a él y a su hermano mellizo. Sus padres tuvieron a Esteban cuando eran una joven pareja de 23 años y aunque vivieron con mucha ilusión su crecimiento, no querían quedarse con un sólo nene en la familia.

Su madre tuvo que esperar 12 años para poder ser mamá nuevamente: en el medio pasó por un fuerte tratamiento y por eso y nació Gastón.

Fue así como comenzaron en la búsqueda que tardó más de lo esperado: pasaron más de 10 años para poder recibir la feliz noticia del positivo que vino por partida doble. "Fueron pasando un año, dos años, tres, cuatro, cinco, seis... Ya en un momento entró en desesperación, hizo tres o cuatro tratamientos diferentes hasta que en uno dio la tecla", recuerda.

-¿Sabés qué tipo de tratamiento fue?

-No sé precisamente cuál era el tratamiento, pero era bastante sacrificado... y 12 años después de su primer hijo, tuvo que esperar todo ese tiempo y finalmente pudo tenernos a Guido y a mí. Al final lo tomo como algo lindo, porque fue lo que más quiso: ejercer su maternidad. Imaginate cómo lo hizo, con el nivel de esfuerzo que lo hizo.

Edul se define "pegote" de su mamá y de su familia en general.

-¿Qué tan pegado sos a tu mamá?

-Soy excesivamente afectuoso con mi familia, y creo que eso me lleva a extrañar mucho cuando viajo... Si bien nunca viví la experiencia de instalarme en otro país, sí viajo mucho. Por ejemplo, el año pasado estuve entre 160 y 170 días afuera, que si uno se pone a pensar, es la mitad del año. Son 5 o 6 meses. Y en esos vaivenes extraño.

-¿Qué es lo que más extrañás?

-Antes no me dolía, porque uno al final cuando arranca, por lo menos a mí me pasaba que tenía hambre de avanzar. Pero hoy, no estar en un cumpleaños me jode. Estar lejos cuando cumple mi viejo, Esteban (su hermano) o mi sobrino... Hoy prefiero no perderme esos momentos. Soy pegote. Creo que los argentinos en general somos muy familieros. Cada noticia buena o mala se las comparto a ellos.

El periodista sueña con convertirse en padre en un futuro. Lo dice con total certeza, aunque cree que para eso tiene que llegar la mujer indicada.

-Cuando no viajás, ¿cada cuánto los ves?

-Trato de almorzar o cenar con mis viejos por lo menos una vez por semana o dos... Hoy al salir del programa a las dos de la tarde, lo llamé a mi viejo y le pregunté: "¿Almorzaste?". Me dijo que no y almorzamos juntos. Compartimos una charla de 40, 50 minutos. Compartir esos pequeños momentos, a mí por lo menos, me hace bien.

-¿Cómo sos como tío?

-Mi relación como tío con Toto, el hijo de Esteban, es una de las que más disfruto. Una vez por semana sí o sí lo paso a buscar por el colegio, le encanta el fútbol. Así que imaginate con lo futbolero que es, que los amiguitos le empiecen a decir que vieron a su papá o a su tío en la tele o en TikTok y demás. Yo disfruto de que él disfrute de eso y es como un amigo. Yo siento en mi sobrino un amigo, aunque tiene ocho años.

Gastón es tío de Toto: su único sobrino a quien además llama amigo. Comparten la misma pasión por el futbol.

-¿Y soñás en algún día convertirte en padre?

-Sí, más que soñar sin dudas lo voy a cumplir. Quiero cumplirlo. Quiero tener hijos y formar una familia. Siempre digo que dos o tres hijos. Con uno me quedo corto. Pero bueno, tiene que llegar la persona indicada y sobre todas las cosas sentirme yo en el momento indicado también.

-¿Es verdad que sólo le has presentado una novia a tu mamá?

-Es verdad, Sol, María Sol, estuve novio de 7 años y no da presentar por presentar. Yo creo que cuando esté seguro presentaré por ahora una sola vez.

Cómo es el fuerte vínculo con su hermano mellizo, Guido

Gastón Edul es mellizo de Guido, quien buscó un camino totalmente opuesto al de sus hermanos: estudió Comercio Internacional, habla tres idiomas, hizo una carrera diplomática y tiene un currículum impresionante.

Ha tenido cargos relacionados a la política pero con el pasar del tiempo apostó por el mundo tecnológico, le gusta la música y la cocina. Además, está en pareja desde hace 6 años, aunque de momento no tiene hijos.

-Hablanos de Guido, tu hermano mellizo. Tiene un vida muy bajo perfil y se corrió a un costado del mundo del fútbol y el periodismo...

-Siempre lo digo, es mi persona favorita en el mundo. Por lejos, si yo tengo que elegir a alguien es a Guido. Además que tenemos una conexión especial.

Gastón tiene un hermano mellizo pero es perfil bajo y poco conocido: hicieron el colegio juntos y hoy comparten el mismo grupo de amigos.

-¿Cómo es esa conexión?

-Es algo que quizás no tienen todos los mellizos porque depende de cómo te criés. Mis viejos nos criaron juntos y nos pusieron en el mismo curso del colegio... Antes se estilaba que a los mellizos los separaban para que la personalidad de uno no se someta a la del otro. Y al final fue un acierto de mi vieja esto de ir al mismo curso porque somos amigos y compartimos nuestro grupo de amigos, salimos juntos, comemos, viajamos... Compartimos muchas cosas.

-¿Y ese sexto sentido de saber cómo se siente el otro, lo tienen?

-Yo no digo que sea un sexto sentido de enterarme cuando le pasa algo, pero sí, la conexión que yo siento es totalmente emocional. Es decir, si yo tengo una gran noticia y estoy feliz, efusivo por algo, pero él está triste por algo de su vida, yo no tengo la capacidad de disfrutar lo que me está pasando. No estoy completo, no me siento entero. Y a él le pasa lo mismo. Entonces al final yo termino prefiriendo un punto medio para los dos.

-¿Les llegó a pasar?

-Sí, me ha pasado que tuve grandes noticias laborales y él no estaba en un buen momento y no me sale ni siquiera llegar a casa o contarle y estar bien. En cambio cuando él está bien, todo es bien recibido.

Edul asegura que tiene una conexión especial con su hermano mellizo.

De padre sirio y madre con raíces sicilianas: así es la familia de Gastón Edul

Gastón es hijo de Emir Omar Edul, que nació en Siria y ha sido comerciante toda su vida pero siempre los apoyó y trato de entender la pasión por el mundo deportivo, que también comparte al mirar cada partido en casa. Su mamá, Silvana que proviene de una familia de italianos, fue profesora de inglés y también ha trabajando en ventas.

-¿Cómo es la mezcla cultural en tu familia siendo tu papá sirio y tú mamá con raíces italianas?

-Mi viejo es sirio vino a los 5 años a Argentina. Mis abuelos son sirios: mi abuelo ya no está pero sí mi abuela Dora. Y familia por parte materna, casi que la única argentina es mi mamá. Entonces, de alguna manera, Esteban, Guido y yo nos sentimos como la primera generación de argentinos en la familia, porque te lo hace sentir la cultura de cada familia, que son radicalmente opuestas.

Gastón creció en una familia multicultural: su familia paterna es de Siria y la materna de Italia. Mis hermanos y yo, sentimos que somos la primera generación de argentinos en la familia".

-¿Opuestas en qué sentido?

-Por ejemplo, a mí pasa algo con mi abuela paterna, la siria, que cumple 90 este año, que es increíble cómo piensa y cómo se crió en una cultura diferente, en otro lugar... cómo toca temas hoy sensibles para la sociedad de otra manera. A veces a uno eso lo choca, pero al final termino entendiendo que es de otra época.

-¿Tienen alguna costumbre que cumplan de cada cultura o son argentinidad a pleno?

-Debo decir que son dos culturas con muy buena comida y por ahí zafamos. De un lado tenemos las mejores pastas del mundo y del otro lado keppe y comida árabe que es excelente.

-En un domingo familiar, ¿llevás el postre? ¿Aprendiste algo de Bake Off?

-La gran deuda que tengo en mi familia es que en los domingos todavía no estoy llevando postre (risas). ¿Sabés que estoy teniendo quilombo con eso? Porque ya me reclama todo el mundo tortas y yo dejé de grabar, hice tres o cuatro tortas más y después no hice nunca más. ¿Sabés lo que es tardar tres horas en hacer cada torta y tener que dedicar el día entero? A mí no me salía fácil, esa es la verdad (risas).

Aunque en su casa se toma mate, en un domingo familiar no pueden faltar las buenas pastas y la comida árabe.

La verdad de su vínculo con Nati Jota y cómo maneja la exposición

-En los últimos meses se te vinculó sentimentalmente con varias famosas. ¿Te molesta que se hable de vos fuera del contexto deportivo?

-Uno no puede tomar lo bueno y decir, no, lo malo no lo agarro. Tenés que bancarte el combo. Llega un momento de esa exposición en la que tu producto deja de ser lo que vos contás, sino que a veces vos te convertís en el contenido. Y a mí me pasa eso, pero me divierte. Lo tomo con naturalidad, soy bastante libre, estoy soltero. Me pasa que a veces me graban en boliches o cuando voy a comer... Ojo, no lo estoy avalando todo porque hay gente conocida que lo sufre y cada uno tiene su personalidad.

Gastón asegura que le divierte el juego en redes sociales sobre su vida sentimental. Sin embargo, ha tenido que cambiar algunos hábitos..

-¿Tuviste que cambiar cosas por esta exposición?

-Cambié hábitos, absolutamente. Quizás yo a los 24, 25, cuando era menos conocido, en un boliche me permitía tomar más, ser más libre con mis amigos. Después, uno solo se autoinhibe. Porque sabés que te están viendo, porque no querés quedar mal con nadie y al final si quiero tomar un par de copas de vino de más, prefiero estar en un asado con mis amigos y hacerlo tranquilamente. Salgo a bailar y la paso bien de otra manera... hay que acostumbrarse, pero suelo manejarme con respeto y prolijidad en general.

-Igual no dejás de ser joven, con 29 años y con fama...

-A ver, el tiempo pasa para todos, 29 años tengo solamente una vez, quizás más adelante, no sé en qué momento laboral pueda salir del foco. Quiero tener 40, 45, 50 años y decir: "Cuando tenía 25, 26, 27 la pasé bárbaro, hice todo lo que quería, no me quedé con ganas de nada". Siempre dentro del marco del respeto. Pero atesorar estos momentos, ¿por qué no divertirme? ¿Qué es lo que me impide divertirme? sobre todo si no estoy ligado a nada ni a nadie, obviamente que sería diferente la cuestión en caso de estar en una relación, pero no siento que le haga mal a nadie y siento que me divierto de manera sana.

"Quiero tener 40, 45, 50 años y decir: 'Cuando tenía 25, 26, 27 la pasé bárbaro, hice todo lo que quería, no me quedé con ganas de nada'".

-Hablando de divertirte ¿Qué pasa realmente con Nati Jota?

-Con Nati arranqué también otro rubro en mi carrera, que es esto que te decía, de ser uno el contenido. Siendo periodista deportivo quizás estaba más acostumbrado a hablar de otras cosas a ir a hablar de vos. Al principio te incomoda un poco y después te vas a acostumbrando y te das cuenta de la dinámica. Te voy a responder como quiero responderte...

-¡Con la verdad!

-Sí, con la verdad y como quiero responderte (risas). Nati es muy genuina y sincera al aire... es decir, no le sale caretear. Con eso digo todo.

Nati Jota y Gastón Edul comenzaron jugando al aire en el streaming de OLGA, pero ese ida y vuelta pasó un poco a la realidad.

-¿Pero han tenido citas? ¿Salieron? Queremos saber más...

-¿Si nos vimos fuera del contexto de OLGA? Sí, nos hemos visto fuera del contexto de OLGA, pero bueno, nada, somos compañeros de laburo y está todo bien. Yo siempre digo que es una gran persona, que laboralmente creo que crecimos juntos y que al día de hoy seguimos en stream. Mientras los dos nos divirtamos haciendo esto, vale. Si no, ya es diferente, cuando uno no la pasa tan bien.

-El shippeo en redes es tremendo, ¿se puede dar en algún momento?

-Voy a responder con algún cassette de fútbol: paso a paso (risas).

Fotos: Chris Beliera/ Video y edición: Martina Cretella y Candela Petch
Retoque: Gustavo Ramírez
Producción: Jazmín Ochoa
Looks: @boliviauniverso y @adidasar
Agradecemos a: Asociación Atlética Argentinos Juniors

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