Hace exactamente 24 años Marcelo Daniel Gallardo salía tricampeón con la camiseta de River y a penas concluido su momento de mayor gloria, se subía a un camión de bomberos con Geraldine La Rosa, su novia de toda la vida quien a las pocas horas se convertiría en su esposa.
“Jamás hubiera pensado que tantas cosas importantes me podrían pasar en tan poco tiempo. Es más: ¡si me lo hubieran dicho, no lo habría creído! ¿La verdad? Este es el mejor final para un año espectacular", expresó a los medios en la noche de 1997, con una sonrisa de oreja a oreja.
A pesar de que tras los festejos futboleros el por aquel entonces jugador escapó rápido hacia la capilla, los hinchas extendieron sus gritos y vitoreos hasta Avenida del Libertador al 13400, lugar en el que se llevó a cabo la ceremonia y la felicidad y lágrimas se entremezclaron en un mismo evento.
"Marcelo llegó a la iglesia a las corridas, porque el mismo día que nos casamos salió campeón como jugador de River Plate. Fue un estrés porque los hinchas se tiraban arriba de la limusina, rompieron los vidrios de la iglesia", recordó Geraldine ante la prensa.
Entre los invitados del mundo del fútbol y espectáculo que abundaron en su casamiento, una de las figuras más recordadas fue el propio presidente de aquel entonces, Carlos Saúl Menem, quien dejó sus bendiciones para Gallardo y su esposa.
La pareja a los pocos años consolidó su familia con cuatro hijos. “Muchas veces nos intentaron separar porque no pueden creer que estemos casados hace tantos años, pero a nosotros jamás nos importó lo que dicen de nuestra vida privada, no le damos lugar a eso. Sabemos quiénes somos y nos hace muy feliz ver a nuestros hijos, eso nos hace fuertes y siempre salimos adelante”, dijo Geraldine respecto a su familia.
