La Monterey Car Week ha deslumbrado a los amantes de los automóviles con una joya de la ingeniería y el diseño: el Rolls-Royce La Rose Noire Droptail. Este vehículo exquisitamente llamativo rinde homenaje a la oscura belleza de la flor de Black Baccara, con pétalos aterciopelados de un rojo profundo. Pero lo que realmente distingue a este coche es su capacidad de jugar con la luz, transformándose en una enigmática rosa negra.
El Rolls-Royce La Rose Noire Droptail se presenta majestuosamente con una longitud de 5,3 metros y un ancho de 2 metros. Su presencia imponente es solo la primera impresión de lo que se avecina.
La carrocería se sumerge en un cautivador tono denominado True Love Red, un guiño a la rosa Black Baccara. La luz se convierte en un pincel que juega con los matices de este color, oscilando entre tonos rojizos y profundos según la perspectiva. La intención es clara: capturar la esencia cromática de la naturaleza y traerla a las calles.
La estética del La Rose Noire Droptail es un testimonio de la creatividad sin límites de Rolls-Royce. Desde su frontal, donde los faros delgados se alzan con elegancia en una posición alta, hasta el capó coronado con iluminación LED diurna, cada detalle es una declaración de estilo vanguardista. La parrilla inferior de nuevo diseño aporta un toque deportivo y moderno, mientras que el capó en color negro añade una dosis de misterio.
En la parte trasera, los pilotos traseros adquieren una nueva función al sostener un spoiler inesperado, que no solo agrega aerodinámica sino también un elemento sorprendente de diseño. Las puertas, curiosamente, se abren en una dirección opuesta a la convencional, llevando la exclusividad a un nuevo nivel. Cada aspecto del diseño del La Rose Noire Droptail está meticulosamente pensado para brindar una experiencia visual y estética inigualable.
Adentrarse en el interior de este Rolls-Royce es como ingresar a un santuario de lujo y estilo. Con capacidad para dos pasajeros, el habitáculo ofrece una sensación de intimidad sin igual. La tapicería predominante en rojo se mezcla con detalles de madera de arce negro proveniente de Francia, generando un equilibrio perfecto entre calidez y sofisticación. Cada elemento, desde los asientos hasta el salpicadero, está cuidadosamente diseñado para armonizar con la carrocería y el espíritu del automóvil.
La innovación también se refleja en la inclusión del reloj Audemars Piguet Royal Oak Concept en el salpicadero. Con una esfera de 43 milímetros, este reloj no solo es funcional sino también un objeto de arte que completa la experiencia interior. El espacio posterior del vehículo está reservado para albergar el techo retráctil, que añade una pizca de emoción a cada viaje.
Bajo el capó, el Rolls-Royce La Rose Noire Droptail alberga un impresionante motor V12 de 6.75 litros, generando una potencia máxima de 600 caballos. Lo que realmente distingue a este vehículo es su diseño desde cero, utilizando una estructura monocasco compuesta de aluminio, acero y fibra de carbono. Esto lo separa definitivamente de otros modelos de la marca, marcando un nuevo capítulo en la historia de Rolls-Royce.
Como era de esperar, la exclusividad tiene su precio. El Rolls-Royce La Rose Noire Droptail está valorado en aproximadamente 25 millones de dólares. Este precio no solo refleja la artesanía y la innovación detrás del vehículo, sino también su estatus como una verdadera pieza de colección destinada a pocos afortunados.
