Tras un día agitado adentro de la casa de Gran Hermano en el que Furia le dio un leve cachetazo a El Paisa, quien reaccionó de una manera exagerada, la mencionada participante se cruzó con Sabrina, una de sus "enemigas" en la casa.
Todo ocurrió luego de que la producción decidiera sancionar a Williams y Juliana, a quienes se les avisó que habían quedado nominados y que ninguno de los dos podría nominar a otros participantes ni ser salvados por el “líder”.
“La semana pasada les advertí sobre determinados comportamientos que no hacían más que resquebrajar las normas de una sana convivencia y de respeto que deben regir en mi casa. Sigo observando con mucha preocupación algunas situaciones que están fuera de lugar y que, obviamente, no voy a permitir. Lamento profundamente que no sepan dirimir sus conflictos de forma civilizada”, planteó Gran Hermano.
Esto también derivó en otros conflictos entre los hermanitos, y la casa fue un nido de problemas durante el resto del día. Como siempre, Furia estuvo en el centro de la escena.
La pelea entre Furia y Sabrina
Furia se trenzó en una nueva discusión con Sabrina, quien le planteó a su compañera de convivencia que se sentía ninguneada: “Me parece una falta de respeto que no me mires a la cara cuando te hablo”.
Entonces, Furia le retrucó, fiel a su personalidad y a los gritos: “¿Qué hay una falta de respeto que yo no te miro? Vos desde que llegaste acá no me mirás a la cara, flaca. Yo no te hice nada”.
"Toda la semana entro al cuarto, y 'la suripanta', dicen. ¿O no? La suripanta está acá cerca...”, le consultó Sabrina, avisándole que sabía que hablaban sus espaldas. “Disculpame, no es para vos. Si te lo tomás para vos es porque hay una cosa ahí”, le respondió Juliana.
“Lo que vos estás diciendo, que vos sentís de tu parte, lo siento yo de la tuya. Porque todos me dejaron de lado una banda. Todas las chicas me dejaron de hablar”, planteó la rubia. Allí, sin vueltas, Furia le dio la razón.
Entonces, Sabrina siguió: "Me dijiste una palabra que a mí me dolió. Yo te lo dije, tuvimos una pelea. Y de ahí me hicieron a un lado, ¿entendés? No creo ser una hija de puta por eso. No me hablaban”. Ella, Furia, le retrucó con la misma moneda: "Yo siempre estuve sola acá adentro, eh. Yo no tenía a nadie que me hable acá. No sé si te diste cuenta”.
"Entiendo quién soy en esta casa y entiendo cómo vibran ustedes. Y básicamente, como ya me di cuenta, yo elijo vibrar en esta. En la de cubrirme y protegerme", argumentó.
