El 29 de abril de 2011, William y Kate dieron el "sí" en una ceremonia que duró cuatro horas y que tuvo dos mil millones de televidentes a nivel global. GENTE, con su estampa indiscutible, así cubrió la boda real.
Cuando vio entrar a su prometida en la imponente Abadía de Westminster, el príncipe William sólo atinó a decir: “Estás hermosa”. Era cierto, con un vestido de Sarah Burton para Alexander McQueen, Kate Middleton brillaba.
El vestido de novia
La novia lució con frescura un verdadero vestido monárquico, que estuvo a la altura de la elegancia iconográfica del de Lady Di. Diseñado por Sarah Burton para Alexander McQueen, fue confeccionado íntegramente en taftán de seda natural, con un moderno escote en V, y mangas largas de encaje. Para el diseñador Fabián Zitta, en Londres el día de la boda: “Fue un acierto la falda de gran vuelo con remate en tablas superpuestas y la gran cola, catedral, como se dice cuando supera los dos metros de apoyo”. ¿El ramo? “Otra elección correcta: cuando el vestido corta a la cintura y la falda es muy amplia, se debe llevar un ramo corto y redondo, tipo bouquet”, dijo Zitta, y destacó el “estudiado look decontracté” de la novia.
La ceremonia en 10 fotos
Los looks de la realeza
Los detalles de una boda única
- Fue un cuento de hadas que costó 30 millones de libras, que incluyó cinco mil agentes de seguridad, y que se replicó en 5.500 fiestas en las calles, donde vivaron a los novios con banderitas, coronas y hasta uñas pintadas con los colores de la bandera inglesa.
- De los 1.900 asistentes a la ceremonia religiosa, sólo 650 tuvieron la suerte de participar del impresionante banquete ofrecido en honor a William y Kate.
- ¿Qué se sirvió? Una selección de canapés, que incluían ensalada de cangrejo de Cornualles sobre blinis de limón, terrina de pato con conserva de frutas, rollos de queso de cabra con nueces caramelizadas, palmeras y palitos de queso, salmón ahumado escocés en blinis de remolacha, tarta de miniatura de berros y espárragos, huevos de codorniz con sal de apio y langostinos escoceses con mayonesa de limón confitado.
Recopilación de material: Mónica Banyik
Arte de portada: Gustavo Ramírez
Texto y fotos: Archivo Atlántida
