A mediados del mes de febrero Juana Viale compartió una romántica postal en sus redes sociales con la que confirmaba su romance con Yago Lange, un conocido deportista y activista por el medio ambiente. Ahora, se dieron a conocer imágenes de sus vacaciones.
La pareja viajó al sur de la Argentina donde no sólo disfrutaron de la naturaleza sino que además se animaron a hacer algunos deportes extremos. Si bien ambos mantienen un bajo perfil en redes sociales, fueron compartiendo algunas postales del viaje.
La pareja, que ya muestran sus momentos románticos en el sur de Chile y en Chubut, enfocando parte de su tiempo en actividades de concientización medioambiental, específicamente en la limpieza de las playas de la Península de Valdés, volvió a mostrarse unida.
Pero no todo fue tranquilo y descanso, ya que la conductora además aprovechó para iniciar en el mundo del surf, deporte favorito de su novio, expandiendo así sus habilidades recreativas. El hecho sorprendió, ya que la pareja no suele exponer sus vivencias personales en sus redes, aunque en este caso se tomaron el tiempo de compartir algunas instantáneas de lo vivido juntos.
El compromiso ambiental de Yago Lange, el nuevo novio de Juana Viale
La oficialización del nuevo romance de Juana Viale tiene a todos en shock por lo sorpresiva. Esta nueva historia de amor que nace parece unir a dos personas que estaban hechas para estar una con la otra. Con un fuerte compromiso con el cuidado del medioambiente, parece ser que los puntos en común entre la nieta de Mirtha Legrand y Yago Lange fueron verdaderamente invaluables.
Para eso alcanza con repasar algunas de las últimas entrevistas que el hijo del medallista olímpico Santiago Lange brindó en los medios de comunicación, tras alejarse de las competencias deportivas para darle rienda suelta a su tarea como director de Parley for the Oceans, una organización que hace limpiezas en las costas rioplatenses, del Atlántico y la Patagonia.
“Un surfer dijo: ´cambiar la situación del mundo es fácil si entre TODOS entendemos que depende de cambiarnos a nosotros mismos´”, escribió hace un tiempo el joven que comparte el activismo por los derechos del medio ambiente con su flamante pareja.
En una entrevista que dio hace un tiempo, Lange se definió como un amante de los deportes extremos. Si bien era un fiel candidato a seguir con honor los pasos de su padre en base a los logros deportivos, hace un tiempo decidió volcar su interés en las causas ambientalistas.
Sobre su austero estilo de vida, profundizó: “No necesitábamos muchas cosas para estar contentos. Teníamos una tele con 5 películas y sin cable. También estaba la caña de pescar y no mucho más. Hoy vivo igual porque todo lo material que me importa puede entrar en un bolso”.
“Como el barco en el que vivíamos estaba amarrado en el club, teníamos un jardín gigante. Nos acostumbramos a algo que nos encantó y nos marcó para toda la vida. Hoy buscamos esa misma tranquilidad alejada de los ruidos”, dijo hace tiempo a Infobae.
Las tareas para ayudar al medio ambiente que hace Yago Lange
En octubre del 2021, en una entrevista con Olé, tras oficializar el giro que decidió dar, lanzó una frase contundente: “hoy mi regata es la ambiental”. Este camino, según contó, comenzó con una simple limpieza que hizo en la costa de Buenos Aires.
“Muchos días no podíamos entrenar porque nos golpeábamos con basura cuando navegábamos, sobre todo después de los días de lluvia. Organizamos una limpieza que en mi cambió la visión de lo que hacía día a día. Si yo no hacía algo por el cuidado del agua no podía pedírselo a otras personas”, detalló.
Y amplió: “Puse en Instagram una historia para que la gente me acompañara a limpiar el Rio de la Plata. Me empezaron a llegar mensajes diciendo “yo voy” y al final fuimos 25 clubes náuticos. Juntamos tres mil kilos de basura”.
El joven manifestó que “hoy en Argentina tenemos la posibilidad de trabajar en la separación de residuos para que no vaya todo en la misma bolsa. El segundo hábito fundamental es evitar el plástico descartable usando una botella reutilizable”.
E insistió que “el tercer hábito es que cada uno puede hacer algo en el cuidado no sólo de las aguas sino del planeta, hay que despertar los intereses ambientales y no hay que pasar por alto la educación, educarnos en cuestiones ambientales es clave”.
