Vicki Xipolitakis habló por primera vez en público de su situación como víctima de Aníbal Lotocki. La modelo comentó su experiencia después de que su hermana, Stefy, quien también es víctima, se mostrara el otro día en una de las manifestaciones pidiendo justicia por Silvina Luna, exigiendo que vaya preso y comentando que Victoria también padece las consecuencias de la mala praxis.
Para hablar de ese tema, Vicki visitó Corta por Lozano, el programa de Telefe, y se expresó por primera vez: “Me da mucho dolor, tristeza y desesperación, porque después de que todo salió a la luz aparecen los miedos”.
Luego, comentó que no se quiere exponer pero que se puso a disposición de Fernando Burlando. “Le dije que si me necesita estoy a disposición de la Justicia. Preferiría que no se sepa, pero si de verdad me necesitan y ayudaría a otras víctimas, pueden contar conmigo”, declaró Xipolitakis.
Vicki Xipolitakis no denunció a Aníbal Lotocki pero se ofreció a dar su testimonio ante la Justicia, cuando sea necesario
“Le conté mi situación, mi triste realidad. Fui una víctima más como tantas mujeres, hombres que pasaron por las manos de este asesino. Yo no quise denunciar porque no quería que se supiera. Te hace lo que quiere y te pone lo que él quiere”, añadió con enojo.
Después, comentó que Lotocki le dijo que le ponía grasa o ácido hialurónico y, con indignación, se lamentó: “Esto es muy peligroso, es veneno. No se puede sacar porque va al músculo”. Luego, admitió que tiene miedo porque “no sabés por dónde puede explotar. Dicen que puede ir a cualquier lado”, tiró.
En el piso le preguntaron por los síntomas y dijo que "están desde siempre porque eso se solidifica”. Luego, añadió: “¿Vieron cuando entrenan que salen del gimnasio y te duele todo? Es porque el músculo se está solidificando. Esto solidifica desde el primer momento y aprendes a convivir con los dolores. A veces cuesta sentarse, pararse, caminar, hacer ejercicio”, indicó.
Vicky Xipolitakis también reveló cómo fue que Lotocki le inyectó el producto “Lo vi prepararlo, no es como dice él que ponía Metacril. Era una bolsita transparente con un polvo blanco, como si fuera cal. Eso lo mezclaba rápido con un aceite, que es silicona líquida, y se hacía como una leche. Eso lo llenaba en una jeringa, te cortaba y te lo ponía”, relató.
Por último, dijo que el proceso era muy rápido y con anestesia local. “En la lipo viví una situación muy similar a las de las otras víctimas: fui por una cosa y me desperté y tenía otra. Después me tuve que hacer un retoque, porque él había abusado de mi cuerpo sin haberle dado mi consentimiento, y fue peor”, cerró diciendo Vicki Xipolitakis.
