Tete Coustarot fue la invitada de hoy del programa "Socios del espectáculo", que conducen Adrián Pallares y Rodrigo Lussich en eltrece, y abrió las puertas de su intimidad. La histórica conductora de televisión y antigua modelo está en pareja con Carlos Gaziglia hace 20 años y reveló cuál es el secreto.
"Estoy casada hace 20 años con Carlos", empezó diciendo Tete cuando le preguntaron por cómo hace para conseguir un equilibrio entre la vida profesional, la familiar y, principalmente, con el placer y el desarrollo personal.
"Yo aprendí de China Zorrilla. Ella una vez me dijo: 'Lo único es disfrutar de un café, de un amigo; lo importante está en las pequeñas cosas'", continuó explicando Tete Coustarot sobre cómo vive en la actualidad.
Luego, Tete agregó: "A veces necesitas que alguien como China te diga eso. Yo disfruto de todo. Todo me interesa, soy muy curiosa y me encanta". En ese momento, una de las panelistas remarcó que ella era una pionera de las familias ensambladas.
Como respuesta, Coustarot expresó: "Antes de la pandemia empezamos a convivir, él vivía con sus hijos adolescentes y cuando se fueron a vivir solos ahí decidimos vivir juntos". Después, cerró diciendo: "convivimos después de 15 años de relación".
A pesar de que ella empezó diciendo que estaba casada hace 20 años, cuando le preguntaron cuándo se casó ella admitió que, pese a estar en pareja hace décadas, nunca se casó. "No nos casamos, nunca me casé, soy soltera y lo seré para toda la vida", cerró Teté Coustarot sobre su relación con Carlos Gaziglia.
Así definió Teté Coustarot a su marido Carlos
"Siento que Carlos es un compañero fantástico y me gusta compartir la vida con él". Además, destacó que ambos se complementan muy bien y que una de las pasiones que más comparten es viajar. “A él le gusta viajar tanto como a mí; esa es una de las cosas que más compartimos juntos”, expresó la periodista -entrevistada por la revista Hola hace unos meses- y sumó: "La independencia económica fue un punto importante para mi forma de vivir. Nunca me importó satisfacer a los otros. Y no tener que de - pender de un matrimonio para la subsistencia me dio una libertad absoluta en cada una de las decisiones que tomé a partir de entonces".
