Fernando Báez Sosa fue asesinado en 2020 y, desde entonces, su caso quedó en las retinas de la sociedad argentina. Todos los rugbiers acusados fueron condenados, pero solo cinco recibieron prisión perpetua por el homicidio. Uno de ellos, Matías Benicelli, en las últimas horas rompió el pacto de silencio que duró casi un lustro.
Entre otras cosas, el homicida denunció a Hugo Tomei, el abogado que lo defendió y que compartía con el grupo hasta hace algunos meses. Sus argumentos son claros: "irregularidades en la defensa" y persuasión de la misma para beneficiar a otros imputados.
Tanto Benicelli como Máximo Thomsen cambiaron de abogado una vez que se ratificó la prisión perpetua de ellos y de otros tres rugbiers: Enzo Comelli, Luciano y Ciro Pertossi. Por otra parte, Ayrton Violaz, Blas Cinali y Lucas Pertossi solo recibieron 15 años porque, según la Justicia, fueron participantes secundarios.
De acuerdo a la información oficial, hay un tercer rugbier que cambió la defensa, mas no se sabe cuál fue de los mencionados. Ahora, Thomsen es defendido por Francisco Oneo y Benicelli por Carlos Attías. Este último doctor presentó un escrito con denuncias contra Tomei ante el Tribunal de Casación Penal.
El fin, según se puede leer, es "recurrir al fallo" bajo el "recurso de inaplicabilidad y nulidad de la sentencia recurrida". Un dato que Benicelli develó y que rompe con el pacto tácito de silencio fue que su familia no pagó los honorarios de Tomei. De esa forma, da a entender que la estrategia legal estuvo direccionada para beneficiar a otros imputados, mas no reveló a quienes.
"Fuimos persuadidos de designarlo para mi defensa técnica a fin de no entorpecer la defensa de otros coimputados", fueron las palabras de Benicelli, uno de los cinco rugbiers que fue condenado a cadena perpetua el año pasado.
En la misma línea, Benicelli expresó que, la estrategia del abogado fue perjudicial para él y para quienes querían declarar ante el tribunal o la prensa. Y dijo que Tomei los asesoró para que no hablaran porque sino entraría en contradicciones con sus compañeros.
Además, el homicida criticó que su exabogado no señalara aspectos que, para él, son claves en la causa. Por ejemplo, la presencia de manchas de sangre en la ropa de Fernando Báez Sosa.
Benicelli también dijo que Tomei no quiso presentar a Alejo Milanesi, quien estuvo detenido pero que rápidamente fue sobreseído con Juan Pedro Guarino. Esto, para el agresor, podría haberlo ayudado en su defensa.
"Por ser un testigo privilegiado en el lugar, y porque mediante sus declaraciones podría persuadir a los sentenciantes que mi participación no fue determinante en el resultado de la muerte de Fernando Báez Sosa", indicó el joven.
Además, expresó: "Quien debía garantizar mi defensa, inexplicablemente desistió del testigo en la misma audiencia". Tomei, por su parte, argumentó su decisión diciendo que "Milanesi podría agravar la situación procesal de los otros co-defendidos".
