Luego de un año abocada a su salud y a su familia, desde su retorno a la vida pública, y con una agenda modesta de compromisos oficiales, Kate Middleton vuelve a copar los reflectores de la prensa especializada en las monarquías europeas.
Sobre esa línea, en estos últimos meses, la prensa inglesa le ha dedicado a la princesa de Gales varios ejemplares en los que ahondan sobre sus métodos de crianza. Así se confirmó que Middleton y el príncipe William han procurado que sus tres hijos tengan una infancia relativamente “normal”, por lo cual implementaron en su hogar una serie de reglas, a veces comunes y otras no tanto: desde castigos pocos convencionales a palabras prohibidas.
Cuáles son las palabras prohibidas en la casa de Kate Middleton y el príncipe William
Bajo ese marco, en los últimos días, trascendió que dentro del hogar de los príncipes de Gales queda completamente prohibido utilizar la palabra “niño”, esto a partir de un principio aplicado por la niñera de los pequeños royals ingleses, María Borrallo.
Según la autora Louise Heren, quien pasó un año en la universidad investigando un documental, la niñera de los príncipes George, Charlotte y Louis tiene muy claro que nunca debe referirse a los niños de la realeza como “niños”. En su lugar, deben ser llamados por sus nombres: “La palabra 'niño' está prohibida. Es una muestra de respeto a los niños como individuos”, declaró a The Mirror.
Esto quiere decir que dentro del hogar de Kate Middleton siempre se hace referencia a los demás por sus nombres propios.
Respecto a quién se encargar de supervisar que los mini royals no utilicen la palabra prohibida ni tengan comportamientos inadecuados, Heren señala como responsable a María, quien ha vivido con la familia real de Gales y los ha acompañado en sus viajes en todo momento.
No obstante, “niño” no es la única palabra que está prohibida en el entorno de la familia real de Middleton, sino que también existe una lista aparte de palabras cuyo pronunciamiento es incorrecto, según las reglas del protocolo inglés.
Por ejemplo, George, Charlotte y Louis tienen estrictamente prohibido decir la palabra “salón”, en su lugar, los pequeños deben referirse a dicho espacio como “sala de estar”.
Otro ejemplo controversial de las palabras que no deben ser pronunciadas por los miembros de la realeza es la palabra “té”, que por más común que sea este significado, los ingleses prefieren decir “cena”.
Asimismo, “sofá” es otra palabra estrictamente prohibida dentro del vocabulario de la realeza. Esto debido a que el término solo se usa en la clase media y baja. En cambio, los miembros de la monarquía deben referirse a este esencial elemento del mobiliario como “diván”.
Además de la palabra “retrete” o “inodoro” que está completamente prohibida para cualquier representante de la Corona, en su lugar los royals deben decir “lavatorio”, otras palabras que los hijos del príncipe William no podrían decir, al menos en público, son: “Elegante”, “perfume”, “mamá” y “papá".
