Familiares y amigos de Carlos Felipe (46) y Sofía de Suecia (40) se reunieron en la iglesia del Palacio Real de Estocolmo para celebrar el tierno bautismo de la pequeña Inés Marie Lilian Silvia Bernadotte cuatro meses después de su nacimiento, la cuarta hija de los príncipes.
Una fecha que a partir de ahora va a ser doblemente especial para ellos y la Familia Real sueca, ya que coincide con su aniversario de boda, hace ya diez años.
Como es tradición, la mini royal lució el faldón de bautismo de la familia Bernadotte como hizo su propio padre, sus hermanos y sus primos. Además, desde la casa real sueca se informó que Inés de Suecia recibió el sacramento con agua que trasladaron desde el palacio de verano de Solliden en Öland, una tradición que comenzó con la princesa Victoria en 1977.
El príncipe Carlos Felipe de Suecia era el primero en llegar a la cita y lo hacía con el uniforme de gala. Sin embargo, quien más expectación levantaba era la madre de la criatura, la princesa Sofía, que rara vez defrauda con sus sofisticados looks.
En ese sentido, la gran incógnita era si apostaría por un traje regional, como hizo en el bautizo de su hijo Gabriel o por un look de ceremonia. Finalmente, su vestido en un vibrante amarillo despejó las dudas. El accesorio central fue la diadema a tono que llevó, el mismo complemento que marcó su outfit en el bautismo de Julián, hace ya tres años.
Todas las fotos del bautizo real de la princesa Inés de Suecia














